Texto utilizado para esta edición digital:
Cotarelo y Mori, Emilio (ed.), Obras de Lope de Vega, V. Madrid, RAE, 1916, pp. 664-700.
- Martínez Fernández, Ángela (Artelope)
Elenco
ALBERTO |
FELICIANO |
CLAVELA |
TEODORO |
OCTAVIO |
FILIBERTO |
LEONARDO |
DORISTA |
TRISTÁN |
LISENO |
ROSARDO |
ELISA |
ALGUACIL 1.º |
ALGUACIL 2.º |
ESCRIBANO |
LEONIDA |
POSTILLÓN |
HOSTELERO |
PAJE |
JUANA |
JULIA |
Dedicatoria
Comedia famosa de Lope de Vega Carpio dirigida al licenciado Juan Pérez en la Universidad
de Alcalá.
“Así aumentó mi afición el ingenio de v. m. el día que en el Real Monasterio de las
Descalzas de Madrid, fundación de su alteza la serenísima princesa de Portugal doña
Juana de Austria, defendió aquellas conclusiones y respondió a los argumentos de tan
insignes varones con tanta valentía, que si antes amaba a v. m. por las obligaciones
que reconozco a su padre, ahora le amo a él por v. m. Bienaventurado llamó Eurípides
al que lo era en los hijos. Ninguna cosa dijo Cicerón que dio la Naturaleza a los
hombres más dulce, y por la misma razón de mayor precio, ni que con mayor cuidado
deba solicitarse a que le tenga; por eso Plutarco reprende los hombres que, procurando
hacienda con tanta diligencia, no cuidan de que sean buenos los hijos a quien ha[n]
de dejarla. Platón, en el libro primero de sus leyes, resumió su número dichoso a
los casados en varón y hembra, que tales pudieran ser en v. m. y la señora sor Petronila
Madalena, cuyas virtudes y divino entendimiento no encarezco porque en la profesión
de su hábito las alabanzas son sayal, y los sayales, perlas. Finalmente, es un ángel
en quien, como espejo lucidísimo, justamente se miran sus padres, y que v. m. debe
tener presente para la compostura de sus años, y si las cartas que escribe no son
presencia, mírese en ellos, que no habrá menester más eficaz ejemplo. Bien me perdonará
v. m. esta lisonja, pues habrá visto en San Cipriano Qui parentes laudat, filios provocat,
cuya materia en el capítulo tercero del Eclesiastés hallará v. m. difusamente. Tres
beneficios dijo Aristóteles que debían los hijos a los padres: la causa del ser, engendrándolos;
la del vivir, criándolos, y la del aprender, informándolos. La primera es de la naturaleza,
la segunda del amor y la tercera de la honra. Esta bien se prueba, pues las otras
no tienen necesidad, en la que solicitan los de v. m. con sus estudios en esa insigne
Universidad de Alcalá, madre ilustrísima de tan generosos hijos que han ilustrado
a España, y como raros fénix en las Ciencias admirado el mundo. Las Artes se llamaron
liberales porque convienen al hombre libre, por opinión de Séneca. Hoc est —dice el
filósofo— sapientem, sublimem, fortem, magnanimum coetera pusilla, et puerilia sunt;
pero v. m. nos da tales esperanzas, que se puede entender de su natural virtud y de
sus pocos años lo que dijo San Agustín: que Juventus, et senium simul esse possunt
inanimo, y por eso dijo también Ausonio que aquella juventud es grave que se parece
a la vejez: algún ejemplo tiene esta comedia, que presento a v. m., de las perdiciones
de los mozos y del cuidado de los padres por verlos ocupados en el amor o el juego,
cuyos daños podrá v. m. advertir en su discurso, pues Dios le dotó de tal virtud y
entendimiento, y repare de paso en que fue la primera en que se introdujo la figura
del donaire, que desde entonces dio tanta ocasión a las presentes. Hízola Ríos, único
en todas y digno de esta memoria. V. m. la lea por nueva, pues cuando yo la escribí
no había nacido. Corregíla lo mejor que pude. Dichoso yo si tantas como me han impreso
hubiera corregido, y las faltas que hallare divida por mitad en el autor y el tiempo,
y alargue Dios el de su vida, como merece y yo deseo, para que gocen sus padres el
fruto de sus estudios.— Capellán de v. m., Lope de Vega Carpio.
Acto I
Acto II
«A esta redondilla le falta un verso.»
«Esta redondilla es defectuosa y no rima.»
Acto III
«“Suerte” no rima, como debía, con “sido”.»
«Tampoco rima “pensamiento” con “presto” y “esto”»
«En el texto, “Julia”.»
«Es la misma que antes llamó “Juana” y vuelve luego a nombrar así.»