Félix Lope de Vega y Carpio

LA FRANCESILLA




Texto utilizado para esta edición digital:
Cotarelo y Mori, Emilio (ed.), Obras de Lope de Vega, V. Madrid, RAE, 1916, pp. 664-700.
Adaptación digital para EMOTHE:
  • Martínez Fernández, Ángela (Artelope)

Elenco

ALBERTO
FELICIANO
CLAVELA
TEODORO
OCTAVIO
FILIBERTO
LEONARDO
DORISTA
TRISTÁN
LISENO
ROSARDO
ELISA
ALGUACIL 1.º
ALGUACIL 2.º
ESCRIBANO
LEONIDA
POSTILLÓN
HOSTELERO
PAJE
JUANA
JULIA

Dedicatoria

Comedia famosa de Lope de Vega Carpio dirigida al licenciado Juan Pérez en la Universidad de Alcalá.
“Así aumentó mi afición el ingenio de v. m. el día que en el Real Monasterio de las Descalzas de Madrid, fundación de su alteza la serenísima princesa de Portugal doña Juana de Austria, defendió aquellas conclusiones y respondió a los argumentos de tan insignes varones con tanta valentía, que si antes amaba a v. m. por las obligaciones que reconozco a su padre, ahora le amo a él por v. m. Bienaventurado llamó Eurípides al que lo era en los hijos. Ninguna cosa dijo Cicerón que dio la Naturaleza a los hombres más dulce, y por la misma razón de mayor precio, ni que con mayor cuidado deba solicitarse a que le tenga; por eso Plutarco reprende los hombres que, procurando hacienda con tanta diligencia, no cuidan de que sean buenos los hijos a quien ha[n] de dejarla. Platón, en el libro primero de sus leyes, resumió su número dichoso a los casados en varón y hembra, que tales pudieran ser en v. m. y la señora sor Petronila Madalena, cuyas virtudes y divino entendimiento no encarezco porque en la profesión de su hábito las alabanzas son sayal, y los sayales, perlas. Finalmente, es un ángel en quien, como espejo lucidísimo, justamente se miran sus padres, y que v. m. debe tener presente para la compostura de sus años, y si las cartas que escribe no son presencia, mírese en ellos, que no habrá menester más eficaz ejemplo. Bien me perdonará v. m. esta lisonja, pues habrá visto en San Cipriano Qui parentes laudat, filios provocat, cuya materia en el capítulo tercero del Eclesiastés hallará v. m. difusamente. Tres beneficios dijo Aristóteles que debían los hijos a los padres: la causa del ser, engendrándolos; la del vivir, criándolos, y la del aprender, informándolos. La primera es de la naturaleza, la segunda del amor y la tercera de la honra. Esta bien se prueba, pues las otras no tienen necesidad, en la que solicitan los de v. m. con sus estudios en esa insigne Universidad de Alcalá, madre ilustrísima de tan generosos hijos que han ilustrado a España, y como raros fénix en las Ciencias admirado el mundo. Las Artes se llamaron liberales porque convienen al hombre libre, por opinión de Séneca. Hoc est —dice el filósofo— sapientem, sublimem, fortem, magnanimum coetera pusilla, et puerilia sunt; pero v. m. nos da tales esperanzas, que se puede entender de su natural virtud y de sus pocos años lo que dijo San Agustín: que Juventus, et senium simul esse possunt inanimo, y por eso dijo también Ausonio que aquella juventud es grave que se parece a la vejez: algún ejemplo tiene esta comedia, que presento a v. m., de las perdiciones de los mozos y del cuidado de los padres por verlos ocupados en el amor o el juego, cuyos daños podrá v. m. advertir en su discurso, pues Dios le dotó de tal virtud y entendimiento, y repare de paso en que fue la primera en que se introdujo la figura del donaire, que desde entonces dio tanta ocasión a las presentes. Hízola Ríos, único en todas y digno de esta memoria. V. m. la lea por nueva, pues cuando yo la escribí no había nacido. Corregíla lo mejor que pude. Dichoso yo si tantas como me han impreso hubiera corregido, y las faltas que hallare divida por mitad en el autor y el tiempo, y alargue Dios el de su vida, como merece y yo deseo, para que gocen sus padres el fruto de sus estudios.— Capellán de v. m., Lope de Vega Carpio.


Acto I

(Salen primero ALBERTO, viejo, padre de FELICIANO, y LISENO, su amigo.)

ALBERTO
Redondilla
¿Eso ha hecho?

LISENO
Como amigo
de Feliciano y de vos,
os cuento el caso.

ALBERTO
Por Dios,
que es digno de gran castigo.
Redondilla
5
¡Oh, padres, todo es cuidado
de tener hijos que amar
y después todo es pesar
de habellos imaginado!

LISENO
Redondilla
Caro Alberto, no te espante;
10
que, comoquiera que sea,
Naturaleza desea
engendrar su semejante.

ALBERTO
Redondilla
¡Pluguiera a Dios no supiera
filosofía tan clara!
15
Si semejante engendrara,
en algo me pareciera
Redondilla
y no en darme pesadumbre.

LISENO
También cuando mozo fuiste
de esas locuras hiciste,
20
y fue tu antigua costumbre.

ALBERTO
Redondilla
Pues qué, ¿fui yo jugador?
¿Fui desvanecido amante?

LISENO
Eso, Alberto, no te espante,
que antes habilita Amor.
Redondilla
25
Es mozo, y su inclinación
es juego y amor.

ALBERTO
No nombres
inclinación en los hombres
su deshonra y perdición.

LISENO
Redondilla
Pues ¿qué ha de hacer un mancebo
30
discreto, galán y en corte?

ALBERTO
Seguir de su padre el norte
por la estrella que le llevo.

LISENO
Redondilla
No es mucho que sea liviano
y gaste en amor y juego.

ALBERTO
35
De tales consejos ciego,
¿qué no ha de hacer Feliciano?
Redondilla
¿Ganástele tú el dinero
por ventura?

LISENO
¡Bueno! ¿Yo?
A los trucos lo perdió.

ALBERTO
40
¿Y no los juegas?

LISENO
Ni quiero.
Redondilla
Que de estar allí me pesa
todo el día sin memoria,
hecho un jumento de noria
alrededor de una mesa.
Redondilla
45
Y más ahora en Madrid
puesto está en razón jugar,
que no es tiempo de buscar
los infanzones de Cid.

ALBERTO
Redondilla
Pues ¿no hay muchos virtuosos
50
que traten de honra y papeles?

LISENO
Esto es, por que te consueles
de algunos que son viciosos;
Redondilla
y de éstos el más perdido
pasa y vive bien aquí.

ALBERTO
55
Ese perdido, ¡ay de mí!,
sólo Feliciano ha sido.
Redondilla
Pero no lo será más;
que hoy ha de ser de importancia
partir a la guerra a Francia.

LISENO
60
¿Que en esa locura das?

ALBERTO
Redondilla
¿Locura? Cordura ha sido;
que un hombre que no ha dejado
su patria, aunque viva honrado,
en efecto es en su nido.
Redondilla
65
Vaya mi hijo a la guerra,
deje la infame acogida,
que no es hombre el que en su vida
no ha salido de su tierra.
Redondilla
¿Qué hace un mozo en esta madre
70
de vicios, Circe que encanta,
que a las doce se levanta
a la mesa de su padre?
Redondilla
Si es fiesta, a la una a misa
de iglesia en iglesia va,
75
y si la halla en ella está
parlando con mucha risa.
Redondilla
Y murmura sin provecho
en corros de marquesotes,
engomados los bigotes
80
y la daga sobre el pecho.
Redondilla
¿Qué sirve que le anochezca
armándose a lo cruel
y que traiga en el broquel
pasteles cuando amanezca?
Redondilla
85
¿Que juegue dos mil reales,
como Feliciano a mí,
que no los juegan ansí
muchos hombres principales?
Redondilla
¿Que escriba a aquella señora
90
y dé papeles discretos,
que esgrima y eche más retos
que Ordóñez sobre Zamora?
Redondilla
¿Y que cuando está delante
de gente que a honor se inclina
95
diga que hay guerra en la China,
Bruselas, Mastrique y Gante?
Redondilla
¡Qué bien dicho de éstos fue,
ya que se precian de fieros,
que son como los corderos,
100
que no dicen más de “be”!
Redondilla
Vaya mi hijo a la guerra;
hable entre hombres que lo son.

LISENO
Digo que tenéis razón;
no es hombre el que está en su tierra.
Redondilla
105
Mas él es quien viene aquí.

(Entren FELICIANO, con una carta, y TRISTÁN.)

TRISTÁN
Su criada me le dio.

FELICIANO
A buen tiempo le escribió.
¿Y preguntóte por mí?

TRISTÁN
Redondilla
¡Con qué melindre le tomas,
110
y el sombrero muy de tema!
Abre más quedo la nema,
si no es que el papel te comas.

(Trae TRISTÁN otra carta en el sombrero, de su moza, y todo lo escucha el padre de FELICIANO y LISENO.)

FELICIANO
Redondilla
Hiciéralo a ser veneno.

TRISTÁN
Esperad albricias de él.

LISENO
115
(Leyendo viene un papel.)

FELICIANO
“Señor de mi vida…” ¡Bueno!

TRISTÁN
Redondilla
¿Dice con tilde “señor”?

FELICIANO
¿Por qué lo dices ahora?

TRISTÁN
Porque ya cualquier señora
120
no escribe sino “senor”.

FELICIANO
Redondilla
Ya este borracho comienza.

TRISTÁN
Dicen que tilde en sazón
es perniabrir la razón,
y se tiene a desvergüenza.

(Lea:)

FELICIANO
Redondilla
125
“Hoy, cuando a beber pediste,
mandé un búcaro bajar…”

TRISTÁN
No sabe esa dueña hablar.

FELICIANO
Y tú, ¿dónde lo aprendiste?

TRISTÁN
Redondilla
Si mujer de punto fuera,
130
“bícaro” escribir tenía.

FELICIANO
Y pícaro, en cortesía,
si a vos el papel viniera.
(Lea:)
Redondilla
“Y la que el agua llevaba
este recado traía…”

TRISTÁN
135
¿Que no era mujer?

FELICIANO
Porfía.

TRISTÁN
No sabe escribir.

FELICIANO
Acaba.

(Señala al sombrero, que tiene un papel allí.)

TRISTÁN
Redondilla
¿Ves el que traigo en la banda
del sombrero? Pues a fe
que es de alguna que…

FELICIANO
Oye.

TRISTÁN
¿Qué
140
quieres?

FELICIANO
Vete de aquí, anda.
(Va leyendo.)
Redondilla
“Son mis padres tan sutiles,
que siempre traigo conmigo
espías.”

(Lee también TRISTÁN su billete.)

TRISTÁN
“Tristán amigo,
flor de amantes lacaíles…”

FELICIANO
Redondilla
145
Lee quedo, bestia.

TRISTÁN
“Hoy,
después de barrer la sala…”

FELICIANO
Lee quedo, enhoramala.

(Lea TRISTÁN.)

TRISTÁN
“Para ti labrando estoy
Redondilla
un bravo cuello y camisa…”

FELICIANO
150
¿Caballeriza no hubiera
donde ese papel leyera?

(Va leyendo.)

TRISTÁN
“Y con él irás a misa.”

FELICIANO
Redondilla
Quiero leer. “Y si esperas
a la ocasión y se escapa…”

(Lea TRISTÁN.)

TRISTÁN
155
“¡Ah, quién fuera tu gualdrapa,
por que a limpiarme vinieras!”

FELICIANO
Redondilla
Lleve el diablo tu linaje.
¿Hete de esperar yo a ti?

(Va leyendo.)

TRISTÁN
“No tengas celos de mí,
160
que hoy se ha despedido el paje.”
Redondilla
¡Bravo favor! ¡Brava cosa!
¡Oh, bien escrito papel!

ALBERTO
(¿No llegaremos a él?)

FELICIANO
(¡Es mi padre!)

TRISTÁN
(Ay, Juana hermosa!)

FELICIANO
Redondilla
165
Dame, mi señor, la mano.

ALBERTO
Alzate luego del suelo.
Ya cubres tarde el anzuelo
de tu soberbia, villano.

FELICIANO
Redondilla
¿Qué es esto?

ALBERTO
La justa paga,
170
necio, de tu loco error.

(De rodillas.)

FELICIANO
Dame la mano, señor.

ALBERTO
¿La mano? Con una daga.
Redondilla
No me preguntes por qué.
Las cartas están aquí.

ALBERTO
175
Hoy a Francia has de partir.

FELICIANO
Pues di,
¿qué he hecho?

ALBERTO
¿Qué?

FELICIANO
No lo sé.

ALBERTO
Redondilla
Hoy a Francia has de partir.
Quítate calza y coleto.

FELICIANO
Señor, la partida aceto.

ALBERTO
180
Dalde luego de vestir.

FELICIANO
Redondilla
¿Hoy? Pues ¿cómo?

ALBERTO
Por la posta.

FELICIANO
¿Con qué galas de soldado?
¿He de llevar, cual letrado,
calza larga y cuera angosta?
Redondilla
185
De aquí a un mes me podré ir.

ALBERTO
¿De aquí a un mes? Hoy, luego.

FELICIANO
¿Cómo?

ALBERTO
Eso a mi cargo lo tomo.

FELICIANO
¿No me han de hacer de vestir?

ALBERTO
Redondilla
¿Con qué de noche salías?

FELICIANO
190
De noche son galas locas.

ALBERTO
Si son locas, no son pocas.
Allá las harás.

FELICIANO
¿Porfías?

ALBERTO
Redondilla
Llama, Tristán, a su hermana,
y tráele luego a la puerta
195
dos postas.

TRISTÁN
(Jornada es cierta.)

FELICIANO
¡Señor!

ALBERTO
Tu plegaria es vana;
Redondilla
que es de revista sentencia
donde no hay suplicación.

(Vase TRISTÁN.)

FELICIANO
Eres juez con pasión.
200
(Liseno, ¿es cierta mi ausencia?
Redondilla
¿Es de veras?

LISENO
Es, sin duda.

FELICIANO
¿Sobre qué fue?

LISENO
Sobre el juego.)

FELICIANO
Señor, que me escuches ruego.

ALBERTO
Ruegas a una estatua muda.

FELICIANO
Redondilla
205
Cuando ese nombre te cuadre,
como en efecto es verdad,
usa conmigo piedad
y harante estatua de padre.
Redondilla
(¿Quién, Liseno, lo contó?
210
¿Quién se lo ha dicho, Jesú?)

ALBERTO
¿Dos mil reales juegas tú?
¿Ansí los ganaba yo?

(Entre LEONIDA, su hermana.)

LEONIDA
Redondilla
¿Qué es, señor, lo que me mandas?

ALBERTO
Toma esta llave, Leonida.

LEONIDA
215
La color tienes perdida.—
Hermano, ¿en qué pasos andas?

FELICIANO
Redondilla
(A Francia me envía.

LEONIDA
¿Qué dices?

FELICIANO
Ruégale que…)

ALBERTO
Toma ya;
del escritorio que está
220
entre aquellos dos tapices,
Redondilla
saca un pequeño talego.

LEONIDA
¿Para qué?

ALBERTO
Parte.

LEONIDA
Ya voy.

ALBERTO
Abrevia.

FELICIANO
(Temblando estoy.)

ALBERTO
Entra y desnúdate luego.

FELICIANO
Redondilla
225
Tiempo habrá, o iréme ansí;
solas botas me pondré.

ALBERTO
¿Tienes espuelas?

FELICIANO
No sé;
basta las que llevo en ti.

(Entra TRISTÁN, lacayo.)

TRISTÁN
Redondilla
Ya las postas se ensillaban.
230
Pero ¿para qué son dos?

ALBERTO
Porque habéis de ir con él vos.
¿Cómo tardan? ¿En qué estaban?

TRISTÁN
Redondilla
Yo boca abajo las vi.
No sé, por Dios, en qué están.
235
Pero ¿qué te ha hecho Tristán
que le destierras ansí?
Redondilla
¿Yo a Francia? ¿Tengo yo acaso
lamparones o otro mal?

ALBERTO
Vaya el igual con su igual.

TRISTÁN
240
¿Yo su igual?

ALBERTO
Espera.

TRISTÁN
Paso.

ALBERTO
Redondilla
Déjame leer el papel
del sombrero.

TRISTÁN
¿A qué intención?

ALBERTO
Cédula de confesión
debe de ser.

FELICIANO
(¡Ah, cruel!—
Redondilla
245
Guarda este papel, Liseno,
no le halle acaso en mí.)

ALBERTO
Y él diga qué trae aquí;
a ver, descúbrase el seno.

FELICIANO
Redondilla
Señor, que no traigo nada.

(Vale sacando.)

ALBERTO
250
Cordón de cabellos, bien;
cinticas también…

LISENO
También
es tu cólera extremada.

ALBERTO
Redondilla
Tu retrato.

FELICIANO
(Mil desmayos
me cubren.)

ALBERTO
Vive sin ley.
255
Ved qué gentil Agnusdei
para tempestad de rayos.
Redondilla
No, no; vos iréis adonde
el peto fuerte os le cubra,
para que el valor descubra
260
que a vuestra sangre responde.

(Entra LEONIDA con un talego.)

LEONIDA
Redondilla
El dinero traigo aquí,
y unas postas han llegado.

ALBERTO
Mil escudos he juntado
hoy en oro para ti.
Redondilla
265
Toma, pródigo, que impetras
la porción de tu substancia.
Parte a Francia, que allá, a Francia,
te enviaré cartas y letras.
Redondilla
Plega al Cielo que no vuelvas
270
de la manera que partes,
de donde apenas te hartes
de bellotas por las selvas;
Redondilla
que si a la patria tu madre,
vuelves de tan vil manera,
275
no pienso matar ternera,
sino negar que soy padre.—
Redondilla
Entra, Leonida, y harás
que su ropa blanca toda
se le junte, y acomoda
280
alguna nueva demás.
(Llora LEONIDA.)
Redondilla
¿De qué lloras? ¡Vive el Cielo
que te…!

LEONIDA
¡Ay, mi hermano!

ALBERTO
Liseno,
ven conmigo, que voy lleno
de cólera.

LISENO
Escucha.

ALBERTO
Bueno.

(Vanse todos. Queda FELICIANO y TRISTÁN, su lacayo.)

FELICIANO
Redondilla
285
Ya no digo que les hables,
sino que a Arminda le cuentes…
¿Qué estás hablando entre dientes?

TRISTÁN
¡Sucesos, por Dios, notables!

FELICIANO
Redondilla
¿De qué te ríes?

TRISTÁN
De verte
290
con mil escudos en oro.

FELICIANO
Pues yo, Tristán, eso lloro;
son vísperas de mi muerte.

TRISTÁN
Redondilla
Métete en cas de un figón
y comamos como grandes,
295
que no habrá Francia ni Flandes
de mayor recreación,
Redondilla
y estemos en caponera
con aquestos mil escudos.

FELICIANO
Sí, que en Madrid andan mudos
300
los cuervos de su ribera,
Redondilla
que acusan más que demonios.
En mi vida vi lugar
más sujeto a murmurar
y a levantar testimonios.
Redondilla
305
No hay sino prestar paciencia.

TRISTÁN
Sobre esa prenda bien creo
que la busque tu deseo.

(Entre el POSTILLÓN de caballos.)

POSTILLÓN
¿Partiremos?

FELICIANO
¡Brava ausencia!
Romance (tirada)
Adiós, Madrid generoso,
310
corazón de España noble,
de donde reciben vida
los demás miembros conformes.
Adiós, alcázar del Rey,
más famoso entre los hombres
315
por las águilas del César,
que al mundo plus ultra pone.
Adiós, patios paseados
de pretendientes disformes,
losas que son sepulturas
320
de imposibles pretensiones.
Adiós, templos y edificios,
casas, plazas, calles, torres
ocupados de hombres, damas,
confusión, caballos, coches,
325
virtudes, hipocresías,
amistades y traiciones,
trazas, quimeras, deseos,
verdades, mentiras, voces;
castas Lucrecias, Tarquinos,
330
Sol, Venus, Martes, Adonis,
Celestinas y Calistos,
Parmenos, Sempronios dobles;
armas, plumas, galas, sedas,
músicas, pincel, colores,
335
fiestas mal vistas, paseos
de diferentes naciones;
poetas quejosos siempre
de la fe de los señores,
porque es ya desdicha suya
340
ser invidiosos y pobres.
Adiós, famosas Audiencias,
donde Dios juzga y Dios oye
por tan famosos ministros
como Alciato compone.
345
Adiós, fuentes; adiós, ríos,
alamedas, prados, bosques,
tardes del sol en invierno
y del verano las noches;
casas de moneda y gusto
350
adonde se bate el cobre,
mar adonde tantos viven
y que tantas naves sorbe.
Adiós, caudalosos juegos,
por quien mi padre, de bronce,
355
hasta Francia me destierra
de los pechos de la corte.
Adiós, Arminda; adiós, celos,
papeles, gustos, amores,
que sólo un taco de trucos
360
ha dado conmigo en Londres.
Adiós, amigos fingidos,
moneda que ahora corre,
y si verdadero alguno
mi destierro sienta y llore.—
365
Postas, camarada, vamos.

(Vase FELICIANO.)

TRISTÁN
Adiós, tabernas de corte,
galera en que yo solía
fundar mis estanteroles;
lavaderos y pilares,
370
baratillo y herradores.
Adiós, Juana, que sin duda
me has pegado lamparones,
pues voy a curarme a Francia
en un rocín matalote.—
375
¿Cómo os llamáis vos, hermano?

POSTILLÓN
Yo, Tristán, llámome Gómez.

TRISTÁN
Vamos, y vaya conmigo
el alano de San Roque.

(Vanse. Entra CLAVELA y DORISTA, dueña.)

CLAVELA
Redondilla
Mientras está aquí Teodoro,
380
Dorista, no me hables nada,
que está la puerta cerrada
a billetes y a tesoro.
Redondilla
No quiero que de mi fama
alguna flaqueza sienta.

DORISTA
385
Y ¿cuándo partirse intenta?

CLAVELA
Cuando quisiera su dama,
Redondilla
que ella le detiene aquí.

DORISTA
A París dice que va.

CLAVELA
Sí va.

DORISTA
Y ¿cuándo volverá?

CLAVELA
390
Eso no me ha dicho a mí.

DORISTA
Redondilla
Bien puedes ahora hablar,
pues esta es buena ocasión.

CLAVELA
Mientras él está en León,
¿cómo te puedo escuchar?

DORISTA
Redondilla
395
Seis papeles te traía
de seis hombres, cuando menos,
de mil necedades llenos.

CLAVELA
Buen libro, por vida mía,
Redondilla
si fuera de devoción.

DORISTA
400
No sé qué esperan tus años,
porque el tiempo y sus engaños
Mercurio y sus alas son.
Redondilla
Goza del oro que llueve
átomos del sol brillantes
405
sobre tus marfiles antes
que le vuelva el tiempo en nieve.
Redondilla
Goza esas rosas que enjugas
sin afeitados martirios,
antes que las vuelvan lirios
410
los años y las arrugas;
Redondilla
y esa boca, mientras deja
que rojo coral la adorne,
antes que la edad la torne
como faltriquera vieja.
Redondilla
415
Los dientes, que perlas son
en nácar, antes que sean
tales, que cuando los vean
parezcan corcho o carbón;
Redondilla
y ese cuello, y ese pecho,
420
y esas manos, y ese todo,
antes que…

CLAVELA
Tú hablas de modo
que ya en tu edad me sospecho.
Redondilla
Dorista, qué puedo hacer
si es descuido de mi hermano?

DORISTA
425
¿Que él te ha de casar?

CLAVELA
Es llano,
que ya estoy en su poder;
Redondilla
no tengo otro padre yo.

DORISTA
¡Ay, Clavela! A Dios rogando,
pero con el mazo dando.
430
Ayúdate tú.

CLAVELA
Eso no,
Redondilla
que no es de mi calidad.

DORISTA
¡Qué inútil es la belleza
empleada en tal tibieza!

CLAVELA
¿Soy muy tibia?

DORISTA
Sí, en verdad.
Redondilla
435
¡Ay de doncellas que veo
que hacen mil estaciones,
ayunos y devociones
con este justo deseo!
Redondilla
Si aguardas a que tu hermano,
440
que, enamorado de Elisa,
le da tu hacienda, él te avisa
que tú le aguardas en vano.
Redondilla
Sé tú como alguna loca
que aguarda, por lo encogido,
445
que le metan el marido
con la cuchara en la boca.
Redondilla
Descúidase el padre, amiga;
pasa en flor sin pasar plaza,
y queda la calabaza
450
la simiente en la barriga.
Redondilla
No lo ha de hacer todo un padre,
no ha de ser todo concierto,
no es muy malo Filiberto,
¡por el siglo de mi madre!
Redondilla
455
Que aun hoy le he visto llorar
porque no le quieres bien.

CLAVELA
No le muestro yo desdén;
pero no le puedo hablar.

DORISTA
Redondilla
No hay en Francia tal mancebo,
460
tan rico ni gentil hombre,
y tú huyes de su nombre
por lo que le quiero y debo.
Redondilla
¡Qué donaire y discreción!
¡Qué gala y qué bizarría!

CLAVELA
465
Debe de ser que soy fría
y helada de condición.

DORISTA
Redondilla
Créeme que me ha obligado,
y esto de darme interés
vuelve un monte del revés.
470
Ya es enojarte excusado,
Redondilla
pues Filiberto está aquí,
que por el jardín entró.

CLAVELA
Y ¿quién le ha metido?

DORISTA
Yo.

CLAVELA
¿Qué dices?

DORISTA
Entra.

CLAVELA
¡Ay de mí!

(Entra FILIBERTO, galán francés.)

FILIBERTO
Redondilla
475
De tan grande atrevimiento
doy, señora, por disculpa
ser vos la causa y la culpa
de este honrado pensamiento.
Redondilla
Ansí, que si él es culpado
480
de haberos dado disgusto,
pensamiento que es tan justo
no puede ser castigado.
Redondilla
Y si a eso me condena
ese rostro, que me obliga,
485
cuando mi pena castiga
volverá la gloria en pena.

CLAVELA
Redondilla
De este vuestro atrevimiento
que parece que os disculpa
ser yo la causa, es la culpa
490
de tan loco pensamiento.
Redondilla
Ansí, que si él es culpado
de haberme dado disgusto,
lo que no puede ser justo
merezca ser castigado.
Redondilla
495
Porque mal podrá guardaros
quien se ha de guardar de vos,
y hay distancia entre los dos
de aborreceros y amaros.

FILIBERTO
Redondilla
Quien de amor tiene experiencia,
500
de tu firmeza y mudanza
suele tener confianza
y en sus trabajos paciencia.

DORISTA
Redondilla
(¡Qué perfiladas locuras
y qué almíbar de razones!
505
¡Qué confitadas pasiones!
¡Qué sabrosas confituras!
Redondilla
Nunca pude ver, por Dios,
estos amantes de fama.
Todos dicen a su dama:
510
“Ojos, decíselo vos.”
Redondilla
¿Razones por alambique
me vas ahora sacando
cuando el brazo está aguardando
a que el barbero le pique?
Redondilla
515
De algunos de éstos presumo
que, por que el amor encarne,
quieren tanto asar la carne
que se les va todo en humo.

FILIBERTO
Redondilla
Pues ¿qué haré yo, madre amada?
520
¿Cómo podré enternecella?

DORISTA
¿Piensas que es una doncella
como una mujer taimada?
Redondilla
Cuantas primerizas veo,
hasta que amor se confirme,
525
tienen la lengua muy firme,
pero muy flaco el deseo.
Redondilla
Oye, espera, que hay mujer
de estas que alargan los plazos,
que quieren venir a brazos
530
para dejarse vencer.
Redondilla
Llega y tómale un abrazo.)

(Va a ella.)

FILIBERTO
Señora, no sé si acierto…

CLAVELA
¿Qué es aquesto, Filiberto?

FILIBERTO
Amor, señora.

DORISTA
(¡Ay, asnazo!)

CLAVELA
Redondilla
535
¿Qué tienes?

FILIBERTO
Amor, señora.

CLAVELA
¿Qué haces?

FILIBERTO
Señora, amor.

CLAVELA
¿Conmigo?

FILIBERTO
Amor y temor
fuerzan el alma que adora.

CLAVELA
Redondilla
Déjame.

FILIBERTO
Mi amor te iguala.

CLAVELA
540
¿Fuérzasme?

FILIBERTO
Amor y mi fe.

DORISTA
(Estáte siempre en la be,
como el cordero que bala.
Redondilla
Amor, amor, en rigor,
es obras, obras es ya.

FILIBERTO
545
La primera letra es A
del a, be, ce del Amor.
Redondilla
Mientras de aquí no me apartes
no diré más, ni lo creas.

DORISTA
Pues si siempre deletreas,
550
nunca juntarás las partes.)

FILIBERTO
Redondilla
Señora, dadme una mano.

CLAVELA
¿Con qué fe?

FILIBERTO
La de marido.

CLAVELA
¿Será cierto?

FILIBERTO
Así la pido.

DORISTA
¿Clavela?

CLAVELA
¿Quién es?

DORISTA
Tu hermano.

CLAVELA
Redondilla
555
¡Ay de mí! ¿Qué haremos?

DORISTA
Corre,
escóndete allí.

FILIBERTO
Sí haré.

(Vase FILIBERTO Sale LEONARDO.)

LEONARDO
Hasta tus pies llegaré,
si tanto Amor me socorre.

DORISTA
Redondilla
No es tu hermano.

CLAVELA
Pues ¿quién es?

DORISTA
560
Leonardo.

CLAVELA
¿Cómo has entrado?

LEONARDO
Trayendo el cuerpo el cuidado,
y el alma y Amor, los pies.

CLAVELA
Redondilla
¿Ha sido tuyo este enredo,
Dorista?

DORISTA
Porque le hablé,
565
di más que mi enredo fue.

CLAVELA
Basta, obligada te quedo.
Redondilla
Poco a poco, si te agrada,
irás trayendo el lugar.

DORISTA
¿No es mejor que no buscar
570
ser una mujer buscada?
Redondilla
¿No sabes tú que el ratón,
cuando tiene un agujero,
nunca goza el año entero
segura la posesión?
Redondilla
575
Cuando en cas de un mercader
algo pretendes comprar
¿no le obligas a sacar
diferencias para ver?
Redondilla
Pues ¿qué enredos hay aquí
580
para que agora los nombres
si has de escoger de mil hombres
uno que te agrade a ti?

LEONARDO
Redondilla
¿Tanto en subir te he ofendido?

CLAVELA
¿Puede ser mayor locura?

LEONARDO
585
Eres tú mi lumbre pura;
loca mariposa he sido.

CLAVELA
Redondilla
Yo te quemaré las alas.

LEONARDO
Como las del corazón.

DORISTA
(Ya con la comparación
590
al otro necio te igualas.
Redondilla
¡Ah, buen siglo haya mi edad,
que el requiebro más sabido
era un ¡ay! interrompido
y una sencilla verdad!
Redondilla
595
Que es ver un amante ahora
hecho un costal de traiciones,
andar por comparaciones
del Sol, del Febo y la Aurora.
Redondilla
Decir con la voz muy flaca;
600
“No cómo sino tormento”,
y de una legua su aliento
huele a salpicón de vaca.)

LEONARDO
Redondilla
Que no hablan de esa dureza
y ese rigor inhumano.

DORISTA
605
Gente suena.

CLAVELA
¿Si es mi hermano?

DORISTA
Escóndete en esa pieza.

(Vase a esconder LEONARDO.)

CLAVELA
Redondilla
¿Parécete bien, Dorista?
¿Ansí a mi honra te atreves?

DORISTA
Guárdate tú como debes,
610
que poco importa la vista.

(Entran OCTAVIO y TEODORO.)

TEODORO
Octava real
Pues, Clavela, que hasta agora ha sido,
como de mi descuido habrás pensado,
para solicitarte igual marido
en alguna manera descuidado,
615
es el mayor cuidado que he tenido
ver de mis hombros el rigor quitado
de tu remedio como prenda mía
llegando de su efecto el cierto día.
Octava real
La ausencia que a París hago no tiene
620
otra ocasión, porque este hidalgo honrado,
que conmigo a besar tus manos viene,
es a quien darte la palabra he dado;
y porque hablar sus padres nos conviene,
que tienen en París igual estado,
625
a la partida quiero que le veas,
firmando aquí lo que en volviendo seas.

OCTAVIO
Octava real
Si como forastero en León no ha sido
Octavio, que en París buen nombre tiene,
de vos y vuestros deudos conocido,
630
por ellos a besar vuestros pies viene;
éstos, humilde, como esclavo, os pido,
aunque su gloria mi humildad detiene.

CLAVELA
Paso, señor; no hagáis tan grande exceso.

OCTAVIO
Pues la tierra en que están adoro y beso.
Octava real
635
Dichoso el día que os vi, que el mismo día
Amor me prometió ventura tanta,
no porque de mis méritos confía,
mas porque mi esperanza me levanta.
Decid con solo un “sí” que seréis mía
640
antes que vuelva de León la planta,
que no me partiré sin que el concierto
quede por vos y vuestro hermano cierto.

CLAVELA
Octava real
La elección de Teodoro tal ha sido,
según vuestra presencia y honra muestra,
645
que sólo del temor interrompido
no os doy el justo “sí” de que soy vuestra.

OCTAVIO
Pues ése, humilde, como esclavo, os pido.

TEODORO
Pues si queréis firmar la hermandad nuestra,
haya testigos.

OCTAVIO
Llamen dos amigos.

DORISTA
650
Yo llamaré, señora, a dos testigos.
Octava real
(Ap.)
(Qué gentil ocasión la que se ofrece
para sacar de casa a estos dos hombres,
que en mí, y aun en Clavela, el temor crece.)

CLAVELA
(¿Dorista?

DORISTA
Que ya entiendo, no los nombres.)

(Vase DORISTA.)

OCTAVIO
655
¿Que mi ventura tanto bien merece?

TEODORO
(De la nuestra es muy justo que te asombres.
¿No te agrada su talle?

CLAVELA
Si es tu gusto,
esto es razón que me parezca justo.)

(Entra DORISTA con LEONARDO y FILIBERTO.)

DORISTA
Endecasílabos sueltos (tirada)
A estos dos caballeros he llamado.

FILIBERTO
660
(Cielos, ¿qué veo? ¿No es aquel Teodoro?)

LEONARDO
(¿Este no es el hermano de Clavela?)

TEODORO
¡Oh, caballeros! Huelgo que sean tales
los que de tales bodas son testigos.

FILIBERTO
Esta dueña, señor, nos ha llamado,
665
aunque la causa no nos dijo.

OCTAVIO
Es ésta:
que yo a Clavela doy y ella da a Octavio
la mano con solemne juramento
que será mi mujer y yo su esposo.—
Decid que sí, que yo lo mismo digo.

CLAVELA
670
Digo que sí.

FILIBERTO
Y yo que soy testigo.

LEONARDO
También yo lo seré. (¡Suceso extraño!)

TEODORO
Vuesas mercedes vayan en buena hora.

FILIBERTO
En la misma quedéis. (Cielos, ¿qué es esto?
¿Que a ver mi muerte vine?)

LEONARDO
(¡Ay, Cielo airado!
675
¿Que aquesto vino a ver mi atrevimiento?)

FILIBERTO
(Si no fuera casándose Clavela,
propósito tenía de mataros
cuando os hallé cerrado en mi aposento.

LEONARDO
Y yo, cuando os hallé, ¡por Dios!, le tuve;
680
pero la igual desdicha me parece
que igualmente nos puede hacer amigos.

FILIBERTO
Vamos.)

DORISTA
(¡Qué buenos van los dos testigos!)

TEODORO
Con esto, pues, a desnudarnos vamos
mientras que los caballos prevengamos.

OCTAVIO
685
Dame un abrazo, esposa mía querida.

(Abrácense.)

CLAVELA
¿Habéisme de olvidar?

OCTAVIO
Vos sois mi vida.

TEODORO
Vamos, que es tarde.

DORISTA
(¡Casamiento extraño!)

CLAVELA
(Dorista, bien lo has hecho.

DORISTA
¡Bravo engaño!)

(Vanse todos; quedan ellas, y salen por otra puerta FELICIANO, muy galán, de camino, y TRISTÁN, su lacayo.)

FELICIANO
Redondilla
¡Brava ciudad es León!

TRISTÁN
690
De las mejores de Francia.

FELICIANO
¿No bebiste?

TRISTÁN
Estaba rancia
la brizna de aquel jamón.
Redondilla
¡Oh, perniles de la Mancha
y vino de San Martín,
695
cuándo en vos mi bergantín
echará en tierra la plancha!
Redondilla
¿Dónde habemos de ir de aquí?

FELICIANO
A Saluces.

TRISTÁN
¿A Saluces?

FELICIANO
Pues bien, ¿de qué son las cruces?

TRISTÁN
700
Pues ¿vas al Piamonte?

FELICIANO
Sí,
Redondilla
y luego habemos de entrar
en los Alpes.

TRISTÁN
¡Bravos son!
Por allí pasó Borbón
cuando a Roma fue a cercar;
Redondilla
705
pero pasólos con nieve.

FELICIANO
Tú los pasarás con vino.

TRISTÁN
Cansado estoy del camino.

FELICIANO
Bien se anda.

TRISTÁN
Poco se bebe.

FELICIANO
Redondilla
¿Qué hará ahora el buen Madrid?

TRISTÁN
710
Digo yo que estará quedo.

FELICIANO
¿Y Arminda?

TRISTÁN
Decirte puedo
que la engañó un lindo ardid.

FELICIANO
Redondilla
Si se está quedo el lugar,
también Arminda.

TRISTÁN
No sé;
715
por él te aseguraré
que ansí le habemos de hallar.
Redondilla
¡Qué comparación tan breve:
caldero y pozo!

FELICIANO
¡Y qué baja!

TRISTÁN
El caldero sube y baja;
720
pero el pozo no se mueve.
Redondilla
Ansí será Madrid y ella:
él quedo y ella mudable.

FELICIANO
No hay cosa que el necio hable
que no me mate con ella.
Redondilla
725
Esto es lo que yo temía.
Y Madrid, en fin, ¿qué hará?

TRISTÁN
Hará sol y lloverá,
como otras veces solía.
Redondilla
A un niño puede igualarse.

FELICIANO
730
Pues ¿cómo a un niño un lugar?

TRISTÁN
Que acabado de limpiar
vuelve otra vez a ensuciarse.

FELICIANO
Redondilla
¡Ah, Prado mío!

TRISTÁN
Bien haces;
como jumento recuerdas.

FELICIANO
735
¿Cómo ansí?

TRISTÁN
Porque te acuerdas
del lugar adonde paces.

FELICIANO
Redondilla
Muy de aguador enojoso
me comparastes, señor;
mas vos no sois aguador.

TRISTÁN
740
Pues ¿qué soy?

FELICIANO
Hombre vinoso.

TRISTÁN
Redondilla
Eso sí, ¡pese a mi sayo!
Niega lo de Perpiñán.

FELICIANO
¿Qué tuve allí, ganapán?

TRISTÁN
Borracho, ¡por San Pelayo!,
Redondilla
745
pues dijiste que era coche
de un albañal el ruido,
y en tu vida no has tenido
más honra que aquella noche.

FELICIANO
Redondilla
Calla, necio.

TRISTÁN
Eso se calle.

FELICIANO
750
¡Qué dos mujeres se ofrecen!
¡Qué bien si mantos parecen
las francesas por la calle!

TRISTÁN
Redondilla
Para la corte española
eran buenas.

FELICIANO
¿Ah, madama,
755
queréis…?

TRISTÁN
Madama la llama.

FELICIANO
Oírme, pues que vais sola.

CLAVELA
Redondilla
Dejadme, señor.

TRISTÁN
Y vos,
¿volete dona onorata
que vi done cualque pata,
760
digo, mano?

DORISTA
Andá con Dios.

TRISTÁN
Redondilla
¡Señora!

DORISTA
Dejadme, hermano.
¡Jesús, qué pesado es!

TRISTÁN
(¿Quién me mandó hablar francés,
que llaman pata a la mano?)

FELICIANO
Redondilla
765
(Tristán, a mil hermosuras
pone este ángel tasa y mengua.

TRISTÁN
Enamórate en tu lengua
y déjate de locuras.)

DORISTA
Redondilla
(Este mozo es español.
770
Pues tu hermano no está aquí,
hazle una burla.

CLAVELA
Sea ansí.)

FELICIANO
(Esta no es mujer, es sol.

TRISTÁN
Redondilla
Sea de invierno, porque pasa
presto aunque tarde amanece.

FELICIANO
775
Más de verano parece
en lo que de presto abrasa.
Redondilla
Sangre me ha dado.

TRISTÁN
¿En qué modo?

FELICIANO
En que la sangre me ha helado.)

CLAVELA
Español, diga, ¿es soldado?

TRISTÁN
780
Él es soldado y yo y todo.

FELICIANO
Redondilla
¿Quién te mete en eso a ti?
¿No sabré yo responder?

TRISTÁN
Es porque ya la mujer
se va aficionando a mí.

FELICIANO
Redondilla
785
Señora, soldado soy;
mas yo tan herido quedo,
que apenas deciros puedo
que agora soldado estoy.

TRISTÁN
Redondilla
(Necio has andado y curioso
790
en decir que estás soldado.

FELICIANO
¿Por qué?

TRISTÁN
Porque habrá pensado
que estás quebrado o potroso.)

CLAVELA
Redondilla
Y ¿dónde vais?

FELICIANO
A la guerra
del General Condestable.

CLAVELA
795
(Talle tiene razonable.
Quien los alaba no yerra.
Redondilla
¡Oh, español!)

DORISTA
(¿Qué dices?

CLAVELA
Digo
que es galán y gentil hombre.)
¿Cómo es, señor, vuestro nombre?

TRISTÁN
800
Tristán me llamo.

FELICIANO
Enemigo,
Redondilla
¿no ves que me habla a mí?—
Feliciano me he llamado,
que hasta ahora no he pensado
que tal nombre merecí.
Redondilla
805
Ahora que puedo veros
más que Feliciano soy.
(¡Cielos, perdiéndome voy!)

CLAVELA
No son los soldados fieros.
Redondilla
Bravos los imaginé;
810
pero vos sois tierno y blando.

FELICIANO
Es que me voy regalando,
cual cera, al sol que miré.

CLAVELA
Redondilla
(¡Ay, Amor! ¿Qué siento en mí
cuando aqueste español veo?)

FELICIANO
815
¿Queréis cumplirme un deseo?

CLAVELA
¿Hablaréis honesto?

FELICIANO
Sí.
Redondilla
¿De dónde venís?

CLAVELA
De ver
partir un hombre a París.

FELICIANO
¿Era muy vuestro?

(Hablan aparte FELICIANO y CLAVELA.)

TRISTÁN
Amadís
820
se comienza a enternecer.
Redondilla
Hablemos vos y yo, dona,
si no es que, por dicha, os pesa,
que pues sois dueña francesa
debéis de ser quintañona.

DORISTA
Redondilla
825
¿Sois vos Lanzarote acaso?

TRISTÁN
Soy camarada y amigo
de este hidalgo, criado digo,
que siempre adelante paso.
Redondilla
Digo que él viene tras mí,
830
él a caballo y yo a pie.

DORISTA
Lacayo diréis.

TRISTÁN
No sé.
Su dinero traigo aquí.
Redondilla
Allá en mi tierra hay pelones,
que es grande usanza Castilla
835
un criado ser malilla
en todas las ocasiones.
Redondilla
Y yo ansí ya con él como
y luego le ensillo el bayo,
porque a veces soy lacayo
840
y a veces soy mayordomo.

DORISTA
Redondilla
¿Es bien nacido?

TRISTÁN
Y qué tanto;
entero, cual ves, nació.

DORISTA
¿Es caballero?

TRISTÁN
¿Yo? No.

DORISTA
Él digo.

TRISTÁN
De vos me espanto.
Redondilla
845
¿No lo veis en los aceros?
Sangre apurada en crisoles.

DORISTA
Que todos los españoles
decís que sois caballeros.
Redondilla
¿Lleva gran dinero?

TRISTÁN
¡Madre!
850
Mil escudos lleva en oro,
y han de enviarle un tesoro,
que tiene un tesoro el padre.
Redondilla
Y yo os daré a vos…

DORISTA
¿Qué es vos?

TRISTÁN
¿No me queréis vos, mi luz?

DORISTA
855
Desvíate allá, avestruz.

TRISTÁN
No quiero ollaza de arroz.

DORISTA
Redondilla
(Hablar quiero a mi señora.—
Clavela, escucha.

CLAVELA
¿Qué quieres?)

FELICIANO
(¿Tristán?

TRISTÁN
Aquestas mujeres
860
nos detienen aquí ahora.

FELICIANO
Redondilla
¡Ay, Tristán, que estoy sin mí!

TRISTÁN
¡Oh, pesia a quien me parió!
Resiste.

FELICIANO
No puedo.

TRISTÁN
¿No?
Mañana te irás de aquí.)

(Han estado hablando las dos solas.)

DORISTA
Redondilla
865
(¿No será la burla buena,
pues que no está aquí tu hermano?

CLAVELA
¡Extremada!—Ya es en vano
querer encubrir mi pena.
Redondilla
Por el hombre estoy perdida.)

DORISTA
870
Señor, ¿qué es vuestra intención?

FELICIANO
Yo estoy de paso a León
y en el alma de partida,
Redondilla
y porque aquesto es mañana,
si esta noche…

DORISTA
Ya os entiendo.
875
Mas la dama que estáis viendo
es de un caballero hermana,
Redondilla
y si acaso os ha de ver
mil escudos de oro es poco.

FELICIANO
(Hoy hago un hecho de loco
880
por tan gallarda mujer.)
Redondilla
Tristán, muestra ese dinero.

TRISTÁN
Veslo aquí.

FELICIANO
Aquí hay mil escudos
y dos hombres que son mudos.

DORISTA
Basta ser vos forastero
Redondilla
885
y ser español. Venid
por que la casa sepáis
y anochecido vengáis.

TRISTÁN
(¿Dístelo?

FELICIANO
Diera a Madrid.)

DORISTA
Redondilla
(Ya tengo los mil.

CLAVELA
¡Ay, triste,
890
que tú le quieres burlar
y yo el alma le he de dar!)

TRISTÁN
(¡Qué gentil locura hiciste!
Redondilla
¿Co qué has de irte?

FELICIANO
Ya me pesa.
El caballo venderemos.)

DORISTA
895
¿Vamos?

FELICIANO
Siguiéndoos iremos.

CLAVELA
(¡Ay, español!)

FELICIANO
(¡Ay, francesa!)

TRISTÁN
Redondilla
(¡Ay, engaños!)

DORISTA
(¡Ay, ganancia!)

TRISTÁN
(¡Ay, escudos!)

FELICIANO
(¡Ay, vivir!)

TRISTÁN
(Ojos que los vieron ir,
900
no los verán más en Francia.)


Acto II

(Sale FELICIANO y TRISTÁN.)

FELICIANO
Redondilla
No me entristezcas, Tristán;
mi desventura me baste.

TRISTÁN
¡Qué Circe, señor, topaste
que tales formas nos dan!
Redondilla
905
Tras cogernos el dinero
como pájaros burlados,
vamos los dos transformados,
yo en sátiro, tú en carnero.

FELICIANO
Redondilla
Boecio pinta muy clara
910
aquesta transformación.
¿De qué casa de Milón
tan baja forma sacara?

TRISTÁN
Redondilla
¿Qué diablos me estás diciendo
inútiles bernardinas
915
en tiempo que a pie caminas
y de hambre vas muriendo?
Redondilla
¡Ah, vieja de Satanás,
pescador con piel de cabra!

FELICIANO
No me hables más palabra.

TRISTÁN
920
Manda menos y anda más.

FELICIANO
Redondilla
¡Ah, villano!

TRISTÁN
Y labrador,
que a un jumento a andar enseña
que va cargado de leña
y descargado de honor.

FELICIANO
Redondilla
925
¿No hizo el César romano
más indignos desatinos?

TRISTÁN
No iba a pie por los caminos
las espuelas en la mano.
Redondilla
No la dieras los quinientos
930
y ahorraras de zapatos,
y compraras más baratos
estos arrepentimientos.
Redondilla
¿Dónde habemos de ir ansí?

FELICIANO
A mi padre escribiré
935
que me robaron.

TRISTÁN
No sé
si te ha de creer.

FELICIANO
Yo sí.

TRISTÁN
Redondilla
¡Que dos hembras y un deseo
te quitan cuanto tenías!

FELICIANO
Ansí hicieron las arpías
940
los manjares de Fineo.

TRISTÁN
Redondilla
Historias.

FELICIANO
Este es lugar.
Buscaré un jumento en él,
que en lo de a pie soy novel
y no puedo caminar,
Redondilla
945
y aun aquí descansaré
mientras lo que digo hallo.

TRISTÁN
¡Que una noche de a caballo
cueste mil años de a pie!

FELICIANO
Redondilla
Este parece mesón.
950
Las botas limpiarme quiero.

TRISTÁN
Aquí sale el Hostelero.

FELICIANO
Tristán, disimulación.

(Sale el HOSTELERO.)

HOSTELERO
Endecasílabos sueltos (tirada)
Mil veces vengan norabuena, príncipes,
que esta es posada de famosos Césares.
955
No pasen adelante, que en el término
no la podrán hallar más a propósito.
¿Qué es del caballo? ¿Es posta? ¿Es corcel de África?
¿De Frisia o Grecia? ¿O es bridón de Nápoles?
¿Tordillo, overo, rucio, blanco, rígido,
960
manso, feroz, hidalgo, noble o zaino?
¿Queréis cebada, cardos, zanahorias,
paja, alcacel, alfalfa?

FELICIANO
¡Bravo estrépito!

TRISTÁN
¿Ansí son por aquí todos los huéspedes?
Señor, no andéis ahora tan solícito,
965
que no hay caballo aquí, freno, ni jáquima;
mas pues baja la noche melancólica,
apercibid la cama y la bucólica;
haya sustento honrado y limpias sábanas.

HOSTELERO
¿Sustento? ¡Pesia tal!

TRISTÁN
Pues ¿qué hay?

HOSTELERO
Diez cónsules
970
pueden comer, porque hay manteles cándidos,
varias toallas de un famoso artífice,
con clavellinas, alhelíes y tréboles,
orejones en Rhin, manteca esguízara,
almendras y melones como azúcares,
975
uvas, ciruelas con panales vírgenes,
tocino lampreado, pastel, tórtolas,
gallina y perdigón con limas ásperas,
macarrones, arroz, sopas con ánades,
chorizos, longanizas y cilléruedas,
980
tortadas, manjar blanco y almojábanas,
truchas, salmón y róbalo con sábalo,
aunque pescado y carne niega el médico;
para postre, con vinos odoríferos,
malvasía y cerveza y pomas de ámbares,
985
queso de España, olivas con su orégano,
toallas, mondadientes y agua de ángeles.

FELICIANO
La relación me ahita.

HOSTELERO
Entrad.

TRISTÁN
¿Hay rábanos?

HOSTELERO
Hay rábanos, hay cardos y hay peruétanos,
chirivías, hinojo, anís, espárragos
990
y para Venus hay ostión marítimo;
pues para la bebida más espléndida
oro, plata, cristal, metal y nácares,
porcelanas japónicas y chínicas.

FELICIANO
Vamos, porque le ha dado la tarántula
995
y dirá que [en] enero tiene albérchigos.

HOSTELERO
¿Qué digo?

TRISTÁN
¿Qué queréis?

HOSTELERO
Un poco pálido
viene este caballero.

TRISTÁN
Desde el miércoles
le dio cierta señora vino estítico,
y, como amante enfermo del estómago,
1000
anda el pobrete con aquellos báguidos
mirando al cielo, que parece astrólogo.

HOSTELERO
Dalle quiero a beber con unos dátiles.

TRISTÁN
Y a mí con un jamón, y sea purísimo,
que me tiene el amor acabadísimo.

(Vanse todos; salen OCTAVIO y TEODORO, de camino.)

TEODORO
Quintilla
1005
¡Buena jornada hemos hecho!

OCTAVIO
¡Hola! Esas postas pasea.

TEODORO
Todo ha sido sin provecho.

OCTAVIO
Yo me huelgo que ansí sea,
para sosegar el pecho.

TEODORO
Quintilla
1010
¡Que olvidase los papeles!

OCTAVIO
Anda, no te desconsueles,
veré otra vez a mi esposa.

TEODORO
¿Holgaráste?

OCTAVIO
Es justa cosa,
y tú más de lo que sueles.

TEODORO
Quintilla
1015
¿Por qué?

OCTAVIO
Por ver a tu Elisa.

TEODORO
¿Qué dirá cuando nos vea
de vuelta con tanta prisa?

OCTAVIO
El alma, que la desea,
me parece que la avisa.

TEODORO
Quintilla
1020
¡Qué tierno me despedí!

OCTAVIO
¿Ha mucho que la pretendes?

TEODORO
Dos años ha que la vi.

OCTAVIO
¿Casarte con ella emprendes?

TEODORO
Pretendo, Octavio, que sí.—
Quintilla
1025
¡Oh, huésped!

(Sale el HOSTELERO.)

HOSTELERO
Señores míos,
¿dónde volvéis?

TEODORO
A León.

HOSTELERO
Partiendo con tantos bríos
¿volvéis en esta ocasión?

TEODORO
Suceden mil desvaríos.
Quintilla
1030
Un papel que me olvidé
me hace volver; mas no importa,
mañana volver podré;
la jornada es algo corta.
¿Hay que comer?

HOSTELERO
Bien, a fe.

TEODORO
Quintilla
1035
Pues venga, mientras se ensilla.
¿Hay algún huésped acaso
que nos ocupe una silla,
si no es que va tan de paso
que no coma hasta la villa?—
Quintilla
1040
Porque no me sabe bien
lo que como, si camino,
menos que a la mesa estén
cuantos hallo en el camino.

OCTAVIO
Bien decís, y a mí también.

HOSTELERO
Quintilla
1045
Todos, por mi fe, se han ido.

OCTAVIO
Quizá por miedo del sol.

TEODORO
Qué, ¿no hay nadie?

HOSTELERO
Aquí ha venido
un gentil hombre español
de buen talle y bien vestido.

TEODORO
Quintilla
1050
¿Español?

OCTAVIO
¿Español?

HOSTELERO
Sí,
aunque con tristeza extraña.

TEODORO
¿Español? Llamalde aquí,
sabremos cosas de España.

HOSTELERO
No es hombre que saldrá ansí,
Quintilla
1055
fuera de que es gran tristeza
la que trae en la cabeza.

OCTAVIO
Mas cortesano ha de ser.
Convidémosle a comer.

TEODORO
Y ¿adónde está?

HOSTELERO
En esa pieza.

TEODORO
Quintilla
1060
¿Ah, señor español?

TRISTÁN
¿Quién
llama a mi señor?

OCTAVIO
Decid
que dos hombres.

TRISTÁN
Está bien.

FELICIANO
¿Son acaso de Madrid?

TRISTÁN
¡Oh, que mal Madrid te den!
Quintilla
1065
Franceses son de León.
Bien es que hablallos procures,
que, al fin, caballeros son.
Llega.

OCTAVIO
¿Español?

FELICIANO
¡Oh, monsures!

OCTAVIO
¿Soldado?

FELICIANO
En la profesión.

TEODORO
Quintilla
1070
Triste dicen que venís.
Alegraos, por vida mía,
que este es alegre país.

OCTAVIO
¡Buen talle, por vida mía!

FELICIANO
Si de veras lo decís,
Quintilla
1075
recibo merced.

TEODORO
Hácer-
nosla podéis en comer
hoy, español, con los dos.

TRISTÁN
(Brindalle quieren, ¡por Dios!
Él se ha de echar a perder.)

FELICIANO
Quintilla
1080
Es gran merced para mí.

TEODORO
¿Qué hay de España?

FELICIANO
Nada allí
que sea nuevo ni se escriba.
Partió el Archiduque.

TEODORO
Él viva
mil años.

FELICIANO
Dios lo haga ansí.

TEODORO
Quintilla
1085
¿El Rey?

FELICIANO
Bueno, Dios le guarde
con el sucesor divino,
águila que emprende alarde
contra el neblí sarracino
y el azor de Asia cobarde.

TEODORO
Quintilla
1090
¿Vais al Piamonte?

FELICIANO
Allá voy.

TEODORO
¿De qué estáis tan triste?

FELICIANO
Estoy
triste desde ese lugar.

OCTAVIO
¿Queréis la ocasión contar?
Perdonad si enojo doy.

FELICIANO
Quintilla
1095
No es nada.

TEODORO
Decid lo que es,
porque si tiene remedio
con vida o con interés…
no estáis del África en medio,
sino del reino francés.
Quintilla
1100
Amigos, dineros, vida
desde aquí os queda ofrecida.

FELICIANO
Mientras que ponen la mesa
os quiero contar mi empresa.

TEODORO
Será con piedad oída.

FELICIANO
Romance (tirada)
1105
Del rigor de un padre airado
partí por fuerza a la guerra,
con mil escudos en oro
mientras que llegaban letras.
Llegué a la gran Zaragoza,
1110
en edificios soberbia;
a Perpiñán y a Tolosa
y a la francesa Provenza.
Por Lenguadoc pasé a Francia,
y entré en León una fiesta,
1115
donde, a la puerta famosa,
vi dos mujeres francesas.
Una moza, ángel en todo,
otra en todo diablo y vieja,
que de ver partir un hombre
1120
a París daban la vuelta.
Saludélas muy cortés,
saludáronme y paguélas
por dos veces las saludes
para que de rabia mueran.
1125
Enamoróme la dama
y engañóme la sirena;
aquélla me lleva el alma
y ésta la bolsa me lleva.
Yo, que no tengo del todo
1130
cerrada bien la mollera,
con lucidos intervalos
y lucida gentileza
di el alma al ángel que digo
y la bolsa a la tercera,
1135
alma de oro en los escudos,
porque eran el alma de ella.
Supe a casa, y en viendo
llegar la noche a su puerta,
llamé con señas, y abrieron
1140
en conociendo las señas.
Quisieran que me quedara;
mas la taimada hechicera
me la traspuso otro día,
que nunca más supe de ella.
1145
Resfrióseme el amor
echando menos la prenda,
o echando menos el oro,
que era la nieve más cerca.
Vendí un frisón que tenía,
1150
y, tomando a pie la senda
de este lugar, vengo agora
haciendo a mi bolsa endechas.
Esta es mi historia, señores;
si queréis saber más nuevas,
1155
la dueña llaman Dorista,
y la señora, Clavela.

TEODORO
Redondilla
(No me ha quedado color.

OCTAVIO
Disimula.

TEODORO
Ansí conviene.

OCTAVIO
Si esto es verdad, morir tiene.

TEODORO
1160
¡Ah, Cielos!

OCTAVIO
¡Notable amor!

TEODORO
Redondilla
Dejadme con él a mí,
que a León le he de llevar.)
¿A pie habéis de caminar?

FELICIANO
(No puedo más.) Señor, sí.

TEODORO
Redondilla
1165
Eso no, que un caballero
cual vos merece favor.
¿Qué me daréis vos, señor,
por otro tanto dinero?

FELICIANO
Redondilla
No tengo seguridad
1170
sino mi persona y Dios.

TEODORO
Yo quiero fiar de vos.
A vuestro padre avisad
Redondilla
que me los remita aquí
en letras, o a Bisanzón;
1175
pero volved a León
conmigo, porque está allí.

FELICIANO
Redondilla
Echarme quiero a esos pies,
que vos me echáis en prisiones.

TEODORO
Estas son obligaciones
1180
de un gentilhombre francés.—
Redondilla
¿Comeremos?

HOSTELERO
Ya está a punto.

TEODORO
Pues vamos alegremente.
Buen huésped, venga esa gente.
(¿Qué hay, Octavio?

OCTAVIO
Estoy difunto.

TEODORO
Redondilla
1185
¡Vive el Cielo, que es mi hermana!

OCTAVIO
¡Vive el Cielo, que es mi esposa!

TEODORO
Morirás muerte afrentosa.

OCTAVIO
Morirás muerte inhumana.)

FELICIANO
Redondilla
(Tristán, no estamos desnudos.

TRISTÁN
1190
¿Cómo ansí?

FELICIANO
¡Bravos consuelos!
¡Oh, franceses de los cielos!

TRISTÁN
Pues ¿qué hay?

FELICIANO
Danme mil escudos.)

 (Vanse todos. Entra DORISTA y CLAVELA.)

DORISTA
Redondilla
Alza, Clavela, los ojos,
no tengas de esto vergüenza.

CLAVELA
1195
A perseguirme comienza
y a darme, Dorista, enojos.
Redondilla
¿Tuya la culpa no fue?

DORISTA
Pues ¿qué es lo que agora tienes?

CLAVELA
Con gentil descuido vienes.

DORISTA
1200
¿Descuido? ¡Bien, por mi fe!
Redondilla
¿De mil escudos en oro
que tienes soy yo culpada?

CLAVELA
Eso no me importa nada.

DORISTA
Pues ¿qué falta?

CLAVELA
Al hombre adoro.

DORISTA
Redondilla
1205
¿Que le adoras? Anda ya,
que es frenesí y accidente.

CLAVELA
¿Acidente en hombre ausente?
En obligación me está.

DORISTA
Redondilla
¿Obligación? Eso aclara.
1210
¿Burlando no le metí?

CLAVELA
Pues él se burló de mí.

DORISTA
¿Qué?

CLAVELA
Burlóme.

DORISTA
¡Tarara!
Redondilla
¿Llevóte joya o cadena
o otra cosa?

CLAVELA
Sí llevó.

DORISTA
1215
¿Qué joya?

CLAVELA
¿Quieres que yo
te lo diga a boca llena?

DORISTA
Redondilla
¡Ay de mí! Cómo, traidora,
¿así infamas tu opinión?

CLAVELA
¿Dísteme tú la ocasión
1220
y estásme riñendo agora?
Redondilla
Pon junto a la estopa el fuego
y dile que no se arda.

DORISTA
Al hecho el remedio tarda;
pon a tus penas sosiego,
Redondilla
1225
que es extranjero y ausente.
En lo demás de tu esposo
habrá remedio forzoso,
quiero decir conveniente,
Redondilla
que en manos está el pandero…
1230
Vuélveme ese rostro acá,
que más firme te pondrá
que suele estar el acero.
Redondilla
Soy maestra enjerta en bruja.
Pues que hay cierta confacción,
1235
o hierba pie de león,
no temas seda y aguja.

CLAVELA
Redondilla
No, madre; monja he de ser.
El español o no más.

DORISTA
Bien a tu hermano darás
1240
que sospechar y que hacer.

CLAVELA
Redondilla
¡No supiera yo un conjuro
para que este hombre volviera!

DORISTA
No hables de esa manera.

CLAVELA
Velle, adoralle procuro.
Redondilla
1245
¿Dónde están unos que enseñan
en un espejo a quien quieren?

DORISTA
¿Qué dirán los que te oyeren
lo que tus deseos sueñan?
Redondilla
No porque eso es mucha empresa
1250
para mi ciencia, señora,
que haré un jardín en un hora,
de berros, en una artesa.

CLAVELA
Redondilla
¡Ay, Dorista, véale yo!

DORISTA
¿Que así el español te mata?

CLAVELA
1255
De esta manera me trata.

DORISTA
¡Pesar de quien me parió!
Redondilla
¡No lo hubiera yo sabido!
Tomara cinta o cabellos,
que yo le hiciera con ellos
1260
despertar de tanto olvido.

CLAVELA
Redondilla
¿Sin ellos no? Ciencia escasa.

DORISTA
¡Ah, Cielos, quién los tuviera,
que aquesta noche viniera
por los aires a tu casa!

(Entra un PAJE.)

PAJE
1265
Por la posta llegó agoraN
X
Nota del editor digital

«A esta redondilla le falta un verso.»

tu hermano, señora, aquí.

CLAVELA
¿Mi hermano?

PAJE
Señora, sí.

CLAVELA
Redondilla
Y ¿quién con él?

PAJE
Viene Otavio
y un caballero extranjero.

CLAVELA
1270
¿Extranjero y caballero?
Calla, no muevas el labio.

 (Entran TEODORO, OCTAVIO, FELICIANO, TRISTÁN.)

CLAVELA
Redondilla
¡Hermano mío!

TEODORO
¡Mi hermana!

FELICIANO
(¿Qué es lo que mis ojos ven?)

CLAVELA
¡Oh, mi señor!

OCTAVIO
¡Oh, mi bien!
1275
(¿Que ésta fue infame y liviana?)

FELICIANO
Redondilla
(Tristán, yo vengo vendido.
Este es de Clavela hermano.

TRISTÁN
Disimula, Feliciano.

FELICIANO
Yo soy muerto.

TRISTÁN
Yo perdido.)

CLAVELA
Redondilla
1280
¿Cómo tan presto venís?

TEODORO
Olvidéme unos papeles.

CLAVELA
Son los descuidos que sueles.

OCTAVIO
Llegara muerto a París
Redondilla
si a veros hoy no volviera.
1285
(¡Ah, infame, si esto es verdad
hoy verás mi voluntad
convertida en rabia fiera!)

TEODORO
Redondilla
(Octavio, muy descuidado
está el español.

OCTAVIO
Yo creo
1290
que alguna, con mal deseo,
le puede haber engañado,
Redondilla
y, por quitalle el dinero,
fingió de tu hermana el nombre.)

CLAVELA
(Ap.)
(Cielos, ¿quién es aquel hombre?

DORISTA
1295
¡Ay, señora, el extranjero!)

FELICIANO
Redondilla
(Si yo no doy a entender
a Clavela este suceso,
que soy perdido confieso
y que ella se ha de perder.)
Redondilla
1300
Señora, si no os he hablado
perdonad la cortesía,
porque desde cierto día
os estoy desobligado,
Redondilla
digo a todas las mujeres;
1305
porque es este vulgar
sólo me pudo burlar
mujer.

OCTAVIO
¿Qué dices?

FELICIANO
Que esperes.
Redondilla
Esto le conté a tu hermano;
que, por no ser caso honesto,
1310
a encubrillo estoy dispuesto
por no parecer villano.
Redondilla
Y él es tan buen caballero
que a su casa me ha traído,
porque prestarme ha ofrecido,
1315
para el camino, dinero.
Redondilla
Yo, del suceso ignorante,
me vine con él aquí,
por que como de él a mí
me mandéis de aquí adelante.

CLAVELA
Redondilla
1320
Ya, señor, os he entendido
que decís que os han burlado.
Aquí seréis regalado
y de esta casa servido;
Redondilla
que lo que gusta mi hermano
1325
es sola mi voluntad.

FELICIANO
Según esto, en la ciudad
puedo andar de paso llano
Redondilla
por no malograr el fruto
de la merced de esta casa.

CLAVELA
1330
(¿Has caído en lo que pasa?

(Sale DORISTA.)

DORISTA
¡Oh, como español, astuto!)

CLAVELA
Redondilla
¿Cómo os llamáis?

FELICIANO
Feliciano.
¿Y vos?

CLAVELA
Clavela es mi nombre.

FELICIANO
Bésoos los pies.

TRISTÁN
(Mata el hombre.
1335
Por mi fe que el cuento es vano.)

FELICIANO
Redondilla
Señores, aquí en León
mucho se debe de usar
a las mujeres llamar
Clavelas.

TEODORO
¿Por qué razón?

FELICIANO
Redondilla
1340
Aqueste nombre tenía
aquella que me engañó.

TEODORO
¿Y Dorista se llamó
la dueña?

FELICIANO
Así se decía.

OCTAVIO
Redondilla
(Sin duda le han engañado
1345
y ofendiendo su opinión,
hicieron esta invención
con el nombre disfrazado.

TEODORO
Redondilla
¿Quién duda? Porque una dama
cual mi hermana no podía
1350
hacer tal bellaquería.

OCTAVIO
¡Que pude ofender su fama!
Redondilla
Al Cielo perdón le pido.

TEODORO
Aún no estoy asegurado.)
La dama que te ha engañado
1355
¿vive en lugar conocido?

FELICIANO
Redondilla
Vamos, y os la enseñaré.

OCTAVIO
(Sin duda dice verdad.)

TEODORO
Vamos a ver la ciudad;
luego, hermana, volveré.

CLAVELA
Redondilla
1360
Id, mi señor, en buen hora.

FELICIANO
Clavela, quedá con Dios;
que por lo que toca a vos
no digo nada, señora,
Redondilla
que bien negocia Tristán.

TRISTÁN
1365
(¿Quién dices que es la mujer?

FELICIANO
¡Ay, mi bien!

TRISTÁN
¿Eso has de hacer?
Camina, que te verán.)

 (Vanse, y quedan las dos solas.)

CLAVELA
Redondilla
¡Notable suceso!

DORISTA
¡Grave!

CLAVELA
¡Ah, Feliciano discreto!

DORISTA
1370
Ya yo le quiero.

CLAVELA
En efeto,
es español.

DORISTA
Mucho sabe.
Redondilla
Bien ha remediado el caso.

CLAVELA
¿Quién a contárselo vino?

DORISTA
Es muy propio del camino
1375
cuando se encuentran acaso.
Redondilla
Y este volver de tu hermano
y el que ha de ser tu marido,
por certificarse ha sido,
y que lo procura es llano.
Redondilla
1380
Y plegue a Dios que no vayan
a que enseñen la mujer.

CLAVELA
Dorista, ¿qué puedo hacer?,
que mil cosas me desmayan.

DORISTA
Redondilla
Dalle aviso en un papel
1385
del peligro y del remedio.

CLAVELA
De tanta desdicha en medio,
¿qué remedio he de poner?
Redondilla
Pero, con todo, confío
que el juicio de este español,
1390
claro y sutil como el sol,
será su remedio y mío.

(Entran FILIBERTO y LEONARDO.)

FILIBERTO
Redondilla
En ausencia de su hermano
pienso aliviar mi tormento,
ya di mi esperanza al viento
1395
y mi pensamiento vano.
Redondilla
En efecto, fue a París.

CLAVELA
¿Quién sube, Dorista?

FILIBERTO
Amigos.

DORISTA
¿Cómo ansí?

FILIBERTO
Los dos testigos.

CLAVELA
Pues agora ¿a qué venís?

FILIBERTO
Redondilla
1400
A ver si hay en qué servir
sobre el negocio pasado.

DORISTA
¿Fue negocio tan cerrado
que le queremos abrir?

FILIBERTO
Redondilla
Clavela, en quien satisfizo
1405
su poder Naturaleza,
que lo que es mortal belleza
de cuatro elementos hizo;
Redondilla
y así mi disculpa alcanza
tu perdón, Clavela hermosa,
1410
pues es cosa en ti forzosa,
siendo viento, hacer mudanza.
Redondilla
Notable mudanza has hecho
dentro de un hora conmigo:
ya fui esposo, ya testigo
1415
del que ya vive en tu pecho.
Redondilla
Ya que matarme querías,
¿por qué ha sido de una vez?
que el más tirano juez
da término de tres días.

CLAVELA
Redondilla
1420
Si en presencia de Teodoro
y de mi marido Octavio
te atreves hacerme agravio
contra mi honor y decoro,
Redondilla
a Leonardo contra ti
1425
me quejo de este mal trato.

LEONARDO
Adoro tu pecho ingrato;
pero ¿qué quieres de mí?
Redondilla
¿Quieres que vuelva la espada
contra un hombre que aborreces?

CLAVELA
1430
No quiero la que me ofreces,
que otra espero tan honrada.

LEONARDO
Redondilla
Aquí está Teodoro.

FILIBERTO
¿Aquí?

CLAVELA
Y que el camino dejó.

FILIBERTO
¿A qué efecto se volvió?
1435
La causa, Clavela, di.

CLAVELA
Redondilla
(De éstos quiero aprovecharme,
Dorista, por cuya mano
se librará Feliciano.)

FILIBERTO
¿A qué ha venido?

CLAVELA
A llevarme.

LEONARDO
Redondilla
1440
¡Cómo!, ¿a París?

CLAVELA
Eso intenta
Teodoro por dar contento
a Otavio.

FILIBERTO
¿Y el casamiento?
¿Estás, Clavela, contenta
Redondilla
perdiendo tu patria ansí?

CLAVELA
1445
(Oye aparte un gran secreto.
¿Prometes callar?

FILIBERTO
Prometo,
a fe de hidalgo.

CLAVELA
Oye.

FILIBERTO
Di.

CLAVELA
Redondilla
Yo caso contra mi gusto,
y, sintiendo aqueste agravio,
1450
quiero hacer matar a Otavio,
o sea justo o injusto.

FILIBERTO
Redondilla
¿Cómo lo podrás hacer?

CLAVELA
Tengo a un español hablado
para aquesto concertado,
1455
y aun pagado podría ser.
Redondilla
Ve y hazle dar un caballo
para que luego se huya.

FILIBERTO
Confiado en la fe tuya
iré yo propio a buscallo.)

(Vase.)

LEONARDO
Redondilla
1460
¿Fuése Filiberto?

CLAVELA
Fuése.

LEONARDO
¿Pues sin hablar?

CLAVELA
¡Ah, Leonardo,
de ti mi remedio aguardo!

LEONARDO
¡Ay, quién servirte pudiese!

CLAVELA
Redondilla
A Otavio me va a matar.

LEONARDO
1465
¿Por qué?

CLAVELA
De invidia.

LEONARDO
¿Qué haré?

CLAVELA
Avisarle.

LEONARDO
¿Si podré,
Clavela, a Teodoro hablar?
Redondilla
¿No van juntos?

CLAVELA
Juntos van,
y un español va con ellos.

LEONARDO
1470
Pues ¿cómo podrá ofendellos?

CLAVELA
Muy bien, si al descuido están
Redondilla
y lleva gente consigo;
mas si le avisas yo creo
que engendrará su deseo
1475
de matar a su enemigo.
Redondilla
Mejor es no hablar con él,
sino dalle [a] aquel soldado,
Leonardo, un papel cerrado.

LEONARDO
Pues alto, escribe un papel.

CLAVELA
Redondilla
1480
Yo voy; aguárdame aquí.

LEONARDO
Pues en toda la ciudad
le buscaré.

CLAVELA
Voluntad
me debes.

 (Vase CLAVELA.)

LEONARDO
Tú el alma a mí.—
Redondilla
No lo acierta Filiberto,
1485
Dorista, en matar a Otavio.

DORISTA
¿Cómo matar? ¿Por qué agravio?

LEONARDO
De invidia de aquel concierto.

DORISTA
Redondilla
¿Hase visto tal maldad?

LEONARDO
Y yo pienso, hasta hallalle,
1490
no dejar, para buscalle,
calle en toda la ciudad.
Redondilla
Mas di: ¿quién es el soldado
que dice que va con él,
a quien daré este papel?

DORISTA
1495
(Ap.)
(Sin duda que le ha engañado;
Redondilla
que todo aquesto es a efeto
de avisar a Feliciano.)
Es el que va con su hermano.

LEONARDO
¿Ese, pues?

DORISTA
(Medio discreto.)
Redondilla
1500
Es un español gallardo,
que es huésped de mi señor.

LEONARDO
Debe de tener valor.

DORISTA
Valor y talle, Leonardo.

(Sale CLAVELA con la carta.)

CLAVELA
Redondilla
Como carta la he cerrado.
1505
Decid que de Madrid es,
que el ordinario francés
en este punto ha llegado,
Redondilla
y decid que sois amigo
de su padre, y que en la vuestra
1510
os le encomienda.

DORISTA
(¡Y qué diestra
invención!)

LEONARDO
Esto y más digo.

CLAVELA
Redondilla
Parte.

LEONARDO
No seas escasa
ni me hagas más desprecios.

(Vase.)

CLAVELA
Bien engañé a los dos necios.
1515
Ven, y sabrás lo que pasa.

 (Vanse. Entran TEODORO y OCTAVIO.)

TEODORO
Redondilla
Mucho siento haber sacado
del cambio aqueste dinero.

OCTAVIO
Eso y más pagaros quiero
por quedar asegurado.
Redondilla
1520
¿Dístele los mil escudos?

TEODORO
Con su firma se los di.

OCTAVIO
¿Y él que te ha de dar a ti?
Que andamos necios y mudos.

TEODORO
Redondilla
Daráme otras tantas higas
1525
cuando se vuelva a su tierra.

OCTAVIO
Tal vez por honor se yerra.
¿Con sola firma le obligas?

TEODORO
Redondilla
Haremos una escritura
esta noche tras la cena.

OCTAVIO
1530
Cualquiera pérdida es buena
donde hacienda se aventura.
Redondilla
Líbrete Dios del honor
que no se puede cobrar.

TEODORO
Valió quererlo enmendar
1535
mil escudos.

OCTAVIO
¿No es error?

TEODORO
Redondilla
¡Por qué camino ha sacado
el español su dinero!
Cosa que yo, majadero,
lo haya lastado y pagado.
Redondilla
1540
¡Que de ejemplo y experiencia
bien pudiera yo sacar
que aquéste me quiere dar
sobre cuernos penitencia!

OCTAVIO
Redondilla
Callad, que es necio temor,
1545
y me toca ese desprecio.

TEODORO
Ya yo veo que soy necio;
pero es discreto el honor.
Redondilla
Hasta el postrer desengaño
no he de salir de esta duda.

 (Entran FELICIANO y TRISTÁN.)

FELICIANO
1550
(Todo el color se me muda.
Cuanto tratan es mi daño.
Redondilla
¿Qué haré, Tristán?

TRISTÁN
Solicita,
señor, el postrer remedio,
porque te tienen en medio
1555
la cruz y el agua bendita.
Redondilla
Este es extraño país.
Si no huyes, ten por cierto
que no escapas de ser muerto.)

FELICIANO
Pues, señores, ¿qué decís?

TEODORO
Redondilla
1560
¡Oh, español! Hablando estamos
de esta tu ingrata mujer,
que la deseamos ver,
y vengarte deseamos.

FELICIANO
Redondilla
Aunque es bajeza en un noble,
1565
hoy os la pienso mostrar
sólo porque quiso usar
conmigo aquel trato doble.

OCTAVIO
Redondilla
(Sin duda dice verdad.
¿Qué temes?

TEODORO
Cuando le escucho,
1570
Octavio, consuelo mucho
mi miedo y dificultad.)
Redondilla
Poco a poco hemos llegado
hacia la puerta de Elisa.

OCTAVIO
Sin duda tu amor la avisa.

(Sale ELISA, dama francesa.)

ELISA
1575
¿Tan presto la vuelta has dado?
Redondilla
¿Qué es esto, Teodoro mío?

TEODORO
Que bien tus brazos merezco
por el alma que te ofrezco
y entre suspiros te envío.

ELISA
Redondilla
1580
¿Cómo has vuelto?

TEODORO
Sólo a ver
esos ojos, cuya ausencia
así tratan mi paciencia,
que me fue fuerza volver.

ELISA
Redondilla
En obligación te estoy.
1585
¿Quién son los que están contigo?

TEODORO
Mi cuñado y un amigo.

ELISA
Mi señor, muy vuestra soy.
Redondilla
Tenedme en ese lugar,
porque Clavela es en quien
1590
tengo lo más de mi bien.

OCTAVIO
A los dos podéis mandar.

TEODORO
Redondilla
Pues, Feliciano, ¿es hermosa
esa dama? ¿Qué la miras?
¿Qué te suspendes y admiras?
1595
¿No es toda maravillosa?
Redondilla
¿No te da el verla contento?

FELICIANO
¿Qué contento he de tener
si es aquesta la mujer
con quien me pasó este cuento?

TEODORO
Redondilla
1600
¿Qué? ¿Qué?

FELICIANO
La verdad te digo.

TEODORO
¿Conócesla bien?

FELICIANO
Pues ¿no?
Quemada la vea yo.

TEODORO
¿Que es ella?

FELICIANO
Sí.

TEODORO
(Octavio amigo.

OCTAVIO
Redondilla
¿Qué quieresN
X
Nota del editor digital

«Esta redondilla es defectuosa y no rima.»

?

TEODORO
Peor está
1605
este negocio.

OCTAVIO
¿En qué modo?

TEODORO
Lleváralo el diablo todo,
y nunca volviera aquí.
Redondilla
Toda mi vida lo oí
que procurar desengaño
1610
siempre resulta en más daño.

OCTAVIO
¿Pues dice que es ésa?

TEODORO
Sí.
Redondilla
¡Pluguiera a Dios que ya fuera
mi hermana!

OCTAVIO
No plegue a Dios,
que mejor os está a vos
1615
llevar esa delantera.

TEODORO
Redondilla
¿Por qué?

OCTAVIO
Porque no es mujer
tu hermana para galán.
Una puerta abierto os han
que no tenéis que romper.
Redondilla
1620
Desapasionaos un poco.

TEODORO
¿Que aquí cayó? ¡Suerte fiera!
¡Ojalá mi hermana fuera!

OCTAVIO
Calla, Teodoro, ¿estás loco?

TEODORO
Redondilla
¿Con matar este villano
1625
no quedaba mi honor vivo
del agravio que recibo?
¿Cómo habrá remedio humano?)

TRISTÁN
Redondilla
(Peor el negocio está.
Tú te has echado a perder.

FELICIANO
1630
Luego ¿es ésta su mujer?

TRISTÁN
Las muestras lo dicen ya.

FELICIANO
Redondilla
Señores, ¿quién me ha metido
en tan diabólico enredo,
que ni remediallo puedo
1635
ni deshacer lo que ha sido?
Redondilla
¿Cómo le diré que no?

TRISTÁN
Eso no tiene remedio.

FELICIANO
¿Quién me sacará de en medio
de estos dos?

TRISTÁN
El Cielo y yo.
Redondilla
1640
Bueno fuera haber callado
y no tener que llorar,
que el ganso, por el graznar,
muere a manos del soldado.)

ELISA
Redondilla
¿Por qué no me habláis, Teodoro?

TEODORO
1645
¿Conoces a este español?

ELISA
¡Qué buen talle!

TEODORO
(No es el sol
más claro. Mi afrenta lloro.)

ELISA
Redondilla
Por cierto que su presencia
merece cualquier favor.
1650
Mandalde que entre, señor,
y daréisme a mí licencia
Redondilla
para hacerle algún regalo,
pues vos le hacéis amistad.

TEODORO
(Cuanto ha contado es verdad.
1655
Al mismo Anteón me igualo.
Redondilla
Octavio, ¿qué aguardo aquí?)

ELISA
Seáis, señor, bien venido.

TEODORO
(¿Ves que no le ha respondido
con el enojo?

OCTAVIO
Es ansí.)

ELISA
Redondilla
1660
No me debe de entender.

FELICIANO
¡Ah, ingrata! ¿Ansí me has tratado
y llámasme bien llegado?

ELISA
¿Qué dices?

FELICIANO
Al fin, mujer.

TEODORO
Redondilla
(¿Qué más claro es el deseo?
1665
Mira el enojo que muestra.)

ELISA
(No entiende la lengua nuestra.)

FELICIANO
(¿Qué me dices?

TRISTÁN
Ya lo veo.)
Redondilla
(¡Lindamente los engaña!)

(Entra LEONARDO con la carta.)

LEONARDO
(Hablarle será mejor.)
1670
¿Sois vos acaso, señor,
un gentilhombre de España
Redondilla
cuyo padre está en su corte?

FELICIANO
Yo soy.

LEONARDO
Pues hame encargado,
en un pliego que me ha dado,
1675
que mire lo que os importe
Redondilla
y que aquesta carta os de.
Si quisiéredes dinero
o otra cosa, caballero,
hablad y serviros he.

FELICIANO
Redondilla
1680
(Carta de Madrid, Tristán.

TRISTÁN
Déjame besar el sello.

FELICIANO
Confuso he quedado en vello.
Tristes sospechas me dan.
Redondilla
Letra española imitada
1685
y medio francesa es.

TRISTÁN
Lee, español o francés.

FELICIANO
Clavela firma. No es nada.

TRISTÁN
Redondilla
Antes sí, que es el aviso.
Lee y disimula bien.

FELICIANO
1690
Bien dices; oye también.
(Los dos aparte a leer la carta.)
“Sal de León de improviso
Redondilla
que te va en ello la vida,
que Teodoro y mi marido
son a quien has referido
1695
tu amor y mi honra perdida.
Redondilla
De la ciudad en la puerta
un caballo a punto tienes.
Vivirás si luego vienes,
y si no, mi honra es muerta.”
Redondilla
1700
¿Que ésta me salva la vida?
Sin duda me tiene amor.

TRISTÁN
Vámonos de aquí, señor.)

FELICIANO
La carta tengo entendida,
Redondilla
y con vos me quiero ir
1705
a saber vuestra posada.

LEONARDO
Será merced extremada.

FELICIANO
Soy quien os ha de servir.—
Redondilla
Monsiur, con vuestra licencia
voy con este caballero.

TEODORO
1710
A cenar, señor, espero.

FELICIANO
Yo vendré.

LEONARDO
Vamos.

FELICIANO
Paciencia.

 (Vanse LEONARDO y FELICIANO y TRISTÁN.)

TEODORO
Redondilla
No puedo tomar venganza.

OCTAVIO
Habla a Elisa.

TEODORO
Ingrata fiera,
¿quién si no tú hacer pudiera
1715
tal bajeza y tal mudanza
Redondilla
la noche que me partí?
¿Por mil escudos hiciste
tal bajeza…

ELISA
¿Qué dijiste?

TEODORO
Con el que se va de aquí?

ELISA
Redondilla
1720
¿Qué es esto?

TEODORO
¿Con un soldado?
¿Con un español?

OCTAVIO
¡Ah, Cielos!

ELISA
(Sin duda le engañan celos
del español alabado.)
Redondilla
¿Es porque alabé su talle?

TEODORO
1725
Más; porque, al fin, te gozó

ELISA
¿Aquí, agora?

TEODORO
Agora no.

ELISA
Pues ¿cuándo yo pude hablalle?
Redondilla
¿Vile otra vez en mi vida?

TEODORO
Niega, que te está muy bien.
1730
¡Ah, mala lanzada den
a mujer tan fementida!
Redondilla
¿Y es lo bueno fingir vos
ser mi hermana?

OCTAVIO
Di, tirana,
¿a mi mujer?

TEODORO
¿A mi hermana?

ELISA
1735
(Borrachos están los dos.)

TEODORO
Redondilla
Si mil escudos querías,
¿no te los diera yo a ti?

ELISA
¿Qué escudos, triste de mí?

TEODORO
¿Que ser mi mujer fingías?
Redondilla
1740
¡Vive Dios que a estar casado
mil puñaladas te diera!

ELISA
(Este negocio es tronera.
Voime, que algo les han dado.
Redondilla
No fue sin causa el volver.)
1745
Adiós, Teodoro y Octavio.

 (Vase.)

TEODORO
No satisfago mi agravio
porque, al fin, eres mujer;
Redondilla
mas no esperes que en tu vida
me volverás a ver más,
1750
y en el español verás
que vengo mi honra perdida.

OCTAVIO
Redondilla
¡Qué mejor ha sido ansí!

TEODORO
¿Mejor? Mas él morirá.

OCTAVIO
¿El en qué culpado está?

TEODORO
1755
Tu yerro venciste aquí.

OCTAVIO
Redondilla
¿Cuándo el oro no venció?

TEODORO
Vencerá la misma muerte.
Eso llamaremos suerte,
que el oro no oyó ni vio.

OCTAVIO
Redondilla
1760
Vamos, y en la calle calla,
que es mejor fingirnos mudos.

TEODORO
¿Qué no podrán mil escudos?
Casi estoy por perdonalla.

 (Vanse, y sale FELICIANO.)

FELICIANO
Endecasílabos sueltos (tirada)
Despedíme del hombre a toda prisa,
1765
y con mayor de la ciudad saliendo,
a Tristán he enviado por el campo
por ver si del caballo encuentra señas.
Con él y mil escudos. ¡Cielo santo!,
daré conmigo en los helados Alpes
1770
por ver si entre su hielo el fuego mío
puede hallar la templanza que deseo.
¡Oh! Necio el hombre que por tierra extraña
pone los ojos en mujer ninguna,
que si cuesta la vida en tierra propia,
1775
donde es todo enemigos, ¿qué se espera?

(Entra TRISTÁN.)

TRISTÁN
Basta, señor, que la verdad ha dicho.
Un gallardo caballo relinchando,
que parece que llama tu descuido,
está en lo alto de esa excelsa cuesta.
1780
Tiénele de la rienda un lacayuelo
de estos que a veces llevan los soldados
de Francia, Italia o Flandes a la corte,
con muchas cintas de colores varias,
y un mozo está con él, aunque más lejos.

FELICIANO
1785
Llámale, por tu vida, y tenga el mozo
el caballo entre tanto que me calzo.

TRISTÁN
Ya viene, porque debe de ser tarde.

(Entre CLAVELA, de lacayuelo muy galán, con capote y cintas.)

CLAVELA
Redondilla
¿Ah, señor, no nos iremos?

FELICIANO
Ya me calzo, buen francés.—
1790
Cielos, ¿Clavela no es?

CLAVELA
Detente, no hagas extremos.
Redondilla
Yo soy, a quien tanto debes.
Contigo me has de llevar
o aquí me verás matar.

 (Echa mano a la daga.)

FELICIANO
1795
¿Qué me dices?

TRISTÁN
Que la lleves.

FELICIANO
Redondilla
Envaina la daga y ven.—
Y tú a las ancas la pon.
¿Podrás seguir el frisón?

TRISTÁN
Podré hasta Jerusalén.

FELICIANO
Redondilla
1800
Mi alma se maravilla
de tu ánimo.

CLAVELA
Español,
tú eres mi luz.

FELICIANO
Tú mi sol.

TRISTÁN
¡Qué graciosa francesilla!


Acto III

(Salen ALBERTO, padre de FELICIANO, y LISENO.)

ALBERTO
Redondilla
¿Eso, en efecto, te escriben
1805
Alférez y Capitán?

LISENO
Aquestas nuevas me dan.
No sé si mueren o viven.

ALBERTO
Redondilla
Mi hijo es muerto, sospecho.
¿Vióse desventura igual?
1810
¡Ah, cólera paternal
y cuánto daño me has hecho!
Redondilla
¿Qué animal criado hubiera
que ansí apartara de mí?
¿Qué fiera tratara ansí
1815
sangre que su sangre fuera?
Redondilla
Cuéntase del pez polipo
que ninguna sangre tiene.
Ese nombre me conviene;
de ninguna participo.
Redondilla
1820
Su padre sin sangre soy,
aunque agora bien lo siento
en el tierno movimiento
que en la que me falta doy.
Redondilla
Si acaso no fue por tierra
1825
a Francia, ¿cómo podía?

LISENO
Si le han cautivado, iría
a parar a Inglaterra.

ALBERTO
Redondilla
Si se embarcó en Vinarrós
de duda es bien que me saques,
1830
que, por dicha, en los Alfaques
fue cautivo.

LISENO
¡Bien, por Dios!
Redondilla
Júzgale agora cautivo.

ALBERTO
Pues ha un año que partió
y nunca más escribió,
1835
está cautivo o no es vivo.
Redondilla
Ya, si cautivo estuviera
entre bárbaros contrarios,
con los Padres Mercenarios,
Liseno, escrito me hubiera.
Redondilla
1840
Sin duda que muerto ha sido,
sino que quieres decir
que me pueda persuadir
que está en Madrid escondido
Redondilla
gastando los mil escudos.

LISENO
1845
¡Pluguiera a Dios que eso fuera!

ALBERTO
Pero ¿qué amigos tuviera
que pudieran ser tan mudos?
Redondilla
¡No me escribir en un año!
¡Paciencia! ¡Mi hijo es muerto!

LISENO
1850
Tu pensamiento es incierto.
Por cierto, que estás extraño.
Redondilla
No tengas desconfianza,
que ha de venir presto aquí.

ALBERTO
Eso, Liseno, eso sí
1855
me puede dar esperanza;
Redondilla
con eso es bien que me aplaques.

(Entra JUANA.)

JUANA
Un peregrino francés
te pide que algo le des
por el amor de San Jaques.

ALBERTO
Redondilla
1860
¿Francés? Pues di que entre al punto;
que aunque es pensamiento vano,
pienso que de Feliciano
sabré si es vivo o difunto.

JUANA
Redondilla
Hermanos, entren.

(Salgan OCTAVIO y TEODORO.)

TEODORO
El Cielo,
1865
señor, os prospere y guarde.

ALBERTO
(Ya la sangre en llamas arde
que fue primero de hielo.)

TEODORO
Redondilla
Después de largos caminos
de tierra y mar, fiero estrago,
1870
vamos los dos a Santiago,
noble señor, peregrinos.
Redondilla
Marsella, Roma, Loreto,
Pie de Gruta, Gaeta y otros
lugares santos nosotros
1875
visitamos, en efeto.
Redondilla
Pero aquesta devoción
de los franceses es ya,
desde Carlomagno acá,
la más devota estación,
Redondilla
1880
que él allanó los caminos
de moros y salteadores.

ALBERTO
(En Francia muchos señores,
Liseno, van peregrinos.
Redondilla
Sin falta que éstos lo son.

LISENO
1885
El talle es de noble gente.)

ALBERTO
Holgado me he extrañamente
de que en aquesta ocasión
Redondilla
a mi casa hayáis venido,
y os suplico la aceptéis,
1890
que en ella descansaréis
del trabajo referido;
Redondilla
que lo que veo en los dos,
y el ser la nación amiga,
a ofrecérosla me obliga.

OCTAVIO
1895
Mi señor, págueoslo Dios;
Redondilla
que, en fin, aunque sólo un día
nos podamos detener,
queremos la corte ver,
su grandeza y gallardía.

ALBERTO
Redondilla
1900
Más quiero que os detengáis,
si mi servicio os agrada.

TEODORO
En merced tan extremada
de vuestro valor usáis.
Redondilla
Un Abraham parecéis,
1905
que a los caminos salía
y los huéspedes traía,
como agora vos lo hacéis.

ALBERTO
Redondilla
Si el ángel es, bien se muestra,
que indicios de reyes dais,
1910
porque no diferenciáis
de su grandeza la vuestra;
Redondilla
y ansí, muy contento estoy,
porque nunca España cesa
de amar la nación francesa.
1915
¿De dónde sois?

TEODORO
De vos soy;
Redondilla
que el serlo es tanta ganancia,
que otro príncipe no quiero;
mas cuanto a ser caballero,
soy, señor, de León de Francia,
Redondilla
1920
y este hidalgo, de París.
El peregrinar fue voto
que hicimos, el mástil roto
el galeón San Dionís
Redondilla
en el golfo de las Yeguas;
1925
y digo, en una palabra,
que hasta llegar a una zabra
nadamos cuarenta leguas.

ALBERTO
Redondilla
Tales huéspedes podrán
honrar mi casa algún mes,
1930
porque con esto después
más descansados irán.
Redondilla
Y entre las muchas razones
de haceros esta acogida,
es una traer perdida
1935
mi vida en varias naciones,
Redondilla
por que lo que hago aquí
con mi hijo allá se haga.

TEODORO
Será, señor, justa paga.
¿Hijo ausente tenéis?

ALBERTO
Sí,
Redondilla
1940
y aun en Francia, si está vivo,
que es adonde yo le envié;
pero ya ha un año que fue,
o es muerto o será cautivo.

TEODORO
Redondilla
¿Iba otro alguno con él?

ALBERTO
1945
Un criado de esta sierra.

TEODORO
Y ¿dónde iban?

ALBERTO
A la guerra,
y nunca más supe de él;
Redondilla
que, por dicha, por roballe
mil escudos que le di
1950
cuando le aparté de mí,
alguien debió de matalle.

TEODORO
Redondilla
¿Llamábase Feliciano
y su criado Tristán?

ALBERTO
Cielos, sospechas me dan
1955
que está mi bien salvo y sano.
Redondilla
Sin falta le han conocido.

TEODORO
Habrá un año que a León
llegó de aquesta nación
un soldado bien vestido
Redondilla
1960
y de buen talle y presencia…

ALBERTO
¿Con este nombre y criado?

TEODORO
Y en mi casa fue hospedado.
Porque es de mi padre herencia
Redondilla
que por gentileza sola
1965
esto mismo hacer solía,
y porque afición tenía
a la nación española.
Redondilla
Y los escudos perdidos
al juego, otros mil le di,
1970
que enviarme juró allí,
o a Bizanzón remitidos;
Redondilla
y si vuestro hijo es
esta firma os lo dirá.

ALBERTO
Mostrad. Mas ¿qué dudo ya?
1975
Yo os creo, señor francés.—
Redondilla
¡Ah, firma de aquella mano,
mil besos os quiero dar!

TEODORO
(¡Que viniésemos a hallar
al padre de Feliciano!
Redondilla
1980
¡Viven los Cielos, Octavio,
que a España no ha vuelto más!

OCTAVIO
Aun creo que aquí podrás
vengar parte de tu agravio,
Redondilla
puesto que es venganza impropia
1985
siendo tal la cortesía.)

ALBERTO
Señor, esta firma es mía
y esta letra mi alma propia.
Redondilla
La mano que aquesto pinta
es la que en mí conocéis,
1990
y estas letras que aquí veis
mi sangre son, que no tinta.
Redondilla
Mil escudos os daré
muerto o vivo Feliciano,
que él lo escribió con su mano
1995
y aquesta la estampa fue.
Redondilla
No en balde yo os hospedaba,
pues lo mismo habíades hecho
con el alma de mi pecho,
que esta deuda imaginaba.
Redondilla
2000
Mil abrazos quiero daros.

(Entren LEONIDA y JUANA, criada.)

LEONIDA
Nuevas, Juana, de mi hermano.—
Señor, ¿qué hay de Feliciano?

ALBERTO
Bien podéis, hija, alegraros.
Redondilla
Ved su firma.

LEONIDA
¿Qué recelo?

ALBERTO
2005
Abrazad a estos señores,
que son los exploradores
de esta promisión del Cielo.

LEONIDA
Redondilla
¿Cuánto ha que a mi hermano vistes?

TEODORO
Luego que de aquí partió;
2010
que no os traigo nuevas yo.

LEONIDA
Pues ¿cómo a casa venistes?

TEODORO
Redondilla
Íbamos en romería
y acaso entramos aquí.

ALBERTO
Desde que mi bien perdí
2015
no he tenido tan buen día.
Redondilla
Liseno, estoy como loco.

LISENO
Con mucha razón, por cierto.

ALBERTO
Ya no creo que haya muerto
ni que esté en Argel tampoco.

TEODORO
Redondilla
2020
(Octavio, la vista guarda.
¡Qué mujer hermosa y bella!

OCTAVIO
Bien puedes encarecella.

TEODORO
¡Bella española!

OCTAVIO
¡Gallarda!
Redondilla
Si no fuera intención vana
2025
aquí vengara mi agravio.

TEODORO
Y yo la quisiera, Octavio,
por el trueco de mi hermana,
Redondilla
pues no fuistes su marido,
y no habiendo posesión
2030
no os corre la obligación
que a mí, que su hermano he sido.

OCTAVIO
Redondilla
Buena cuenta habemos dado;
peregrinos y extranjeros.)

ALBERTO
(Sin duda son caballeros.

LISENO
2035
El traje nos lo ha mostrado,
Redondilla
fuera de que su presencia,
Alberto, lo da a entender.)

TEODORO
(Pediréla por mujer,
Octavio, con tu licencia.

OCTAVIO
Redondilla
2040
De mala gana os la doy.)

TEODORO
Señor, aquí aparte oíd.

ALBERTO
Si hay de que os sirváis, decid,
que bien obligado estoy.

TEODORO
Terceto
El amor que he tenido a Feliciano,
2045
sin otra obligación y amistad mía,
fuera de este papel, que está muy llano,
Terceto
supuesto que encubrirme pretendía
a decir que soy noble, me ha obligado,
y por vuestro valor y cortesía;
Terceto
2050
y pues ya mi fortuna, estrella y hado
me trajo a vuestra casa, donde creo
que el Cielo mis venturas ha criado,
Terceto
sabed que en mí se engendra un gran deseo
de quedar por esclavo de esta dama,
2055
que lo seré si tanto bien poseo.
Terceto
Y cuando aquí en España de mi fama
no pudiera informaros, como puedo,
del apellido que León me llama,
Terceto
traigo en el pecho, sin diez mil que heredo
2060
y en ricas joyas, treinta mil ducados,
sin las raíces en que a alguno excedo.
Terceto
Si estando de mis prendas informados
mereciere esta dama por esposa,
desde hoy los dos quedamos desposados.
Terceto
2065
No [os] parezca el pedilla nueva cosa;
con lo que Feliciano me decía,
pintándola discreta, honesta, hermosa,
Terceto
ausente hizo que en el alma mía
se me representase, para amalla,
2070
lo que he visto en mis ojos este día.
Terceto
Si esto no os agradare ni el casalla,
los mil escudos que ese papel dice
podéis, señor, para alfileres dalla.

ALBERTO
Terceto
Para que mi deseo solenice
2075
esa resolución en mi provecho,
el ser quien sois, hidalgo, contradice
Terceto
lo que vos me decís, lo que habéis hecho
y el amistad de Feliciano estimo,
y os doy de hijo aqueste brazo estrecho.
Terceto
2080
Pero aunque en veros a este bien me animo,
justo será el hacer informaciones.

TEODORO
Mostraros quiero en esta corte un primo,
Terceto
que es hombre que con solas dos razones
creo que basta acreditarme.

ALBERTO
En todo
2085
lo muestran bien el talle y las razones.
Terceto
Entraos a descansar, que de otro modo
lo podemos tratar. (Oh, buen Liseno,
hoy mi remedio emprendo y acomodo.

LISENO
Terceto
Aunque eres cuerdo, de cualquiera es bueno
2090
el buen consejo. Mira lo que haces,
que a veces el antídoto es veneno.
Terceto
¿Tan presto de quien son te satisfaces?

ALBERTO
Que yo me informaré.)—Leonida, advierte:
bien es que de éstos el regalo traces,
Terceto
2095
y haráslo, mi Leonida, de esta suerte,
como si fuera para tu marido.

LEONIDA
Haré tu gusto.

LISENO
(Y yo seré tu muerte.)

ALBERTO
Entrad, señor Liseno.

LISENO
(¡Ay, triste suerteN
X
Nota del editor digital

«“Suerte” no rima, como debía, con “sido”.»

!)
Terceto
Entrad, que como veis voy ocupado.

(Vase.)

TEODORO
2100
(Muy bien se ha hecho.

OCTAVIO
Extraño enredo ha sido.)

LISENO
(¿Hay hombre como yo tan desdichado
Terceto
que ha un año que a pedilla por esposa
aún no he podido estar determinado
y que venga un extraño, ¡extraña cosa!,
Terceto
2105
que en un punto la pida, alcance y goce?
¡Ah, bajeza de Alberto codiciosa!
Pero pues que su sangre desconoce
Terceto
y llega tan fingido pensamientoN
X
Nota del editor digital

«Tampoco rima “pensamiento” con “presto” y “esto”»

,
para que su codicia se reboce
2110
pienso ir a la justicia y decir presto
Terceto
que espías son y que los tiene en casa
por cien doblones que le dan por esto.
Disculparáme Amor, si Amor me abrasa.)

(Vase, y entra FELICIANO y TRISTÁN y CLAVELA, de lacayuelo.)

FELICIANO
Redondilla
Esta, Clavela, es la puerta
2115
puerto de nuestras desgracias.

CLAVELA
¿Esta, señor?

FELICIANO
Esta.—¡Oh, gracias
al Cielo que estás abierta!

TRISTÁN
Redondilla
¡Oh, venturosas paredes!
Mil besos las quiero dar.

FELICIANO
2120
Tras tantas tierras y mar
¿callas, Tristán? ¿Callar puedes?

TRISTÁN
Redondilla
Quiero tornar a besarte
y al Cielo mil gracias dar.
Por acá quiero besar.
2125
Mal huele por esta parte.

FELICIANO
Redondilla
¿Qué es eso, Tristán?

TRISTÁN
No sé;
olor es, y no ámbar gris.
Besé al uso de París.
¡Oh, falsa paz!

FELICIANO
Guerra fue.

TRISTÁN
Redondilla
2130
¡Oh, quicios, que tantos días
permitistes que os untasen
para que no rechinasen
porque de casa salías!
Redondilla
¿Posible es, santo Madrid,
2135
que ya mis ojos te ven?

FELICIANO
Y nos dan el parabién
hasta las piedras, oíd.
Redondilla
¡Oh, Prado! ¡Oh, calle Mayor!
¿Que en efecto vuelvo a veros?

TRISTÁN
2140
¿Qué os vuelvo a ver, taberneros?
¿Que ya siento vuestro olor,
Redondilla
bodegones donde vía
tierna vaca y ensalada
que, con cebolla picada,
2145
verde jardín parecía?
Redondilla
¡Vive Cribas, que estoy loco
de ver que me acerco a veros,
brindis vestido y en cueros!

CLAVELA
Vete, Tristán, poco a poco.

FELICIANO
Redondilla
2150
Di ya disparates vanos.
Que tienes juicio dudo.

TRISTÁN
Estos quiero, éstos saludo,
que son mis padres y hermanos.

FELICIANO
Redondilla
Clavela, ¿qué te parece?
2155
¿No es Madrid bello lugar?

CLAVELA
No hay más bien que desear
del que su grandeza ofrece.
Redondilla
Lugar donde tú naciste,
¿qué me puede parecer?

FELICIANO
2160
Aquí serás mi mujer,
volviendo a ser lo que fuiste.
Redondilla
Pero por que la alegría
del golpe no los encuentre,
Tristán, ¿oyes?

TRISTÁN
¿Dices que entre?
2165
Ya voy.—¡Ay, cocina mía!
Redondilla
¿Qué hará Juana? ¿Qué dirá?
¿Si se acordará de mí?
Aquí fue Troya; aquí fui
aquel que vuelvo a ser ya.
Redondilla
2170
Si fregare en vos, cocina,
al tiempo que yo llegare,
¡ay del plato que fregare
aunque sea de la China!
Redondilla
¡Oh, caballeriza en quien
2175
cantaba almohazando el bayo!

FELICIANO
Tú harás, necio, algún ensayo.
Ven acá.

TRISTÁN
Déjame.

FELICIANO
Ven,
Redondilla
que Clavela irá mejor.—
Dale esta carta a mi hermana.

CLAVELA
2180
Voy.—¡Ah, de casa!

TRISTÁN
¡Ah, mi Juana!
¿Friegas o tiénesme amor?

(Entra JUANA.)

JUANA
Redondilla
¿Quién llama?

CLAVELA
Di que está aquí
un lacayuelo francés.

JUANA
¿Eres tú?

CLAVELA
Yo soy.

TRISTÁN
(Ella es.
2185
¿Llegaré?

FELICIANO
Calla.

TRISTÁN
¡Ay de mí!)

CLAVELA
Redondilla
De Feliciano a Leonida
traigo cartas.

JUANA
(Yo me rindo.
¡Qué francesillo tan lindo!)
Entra, amores.

CLAVELA
Voy, mi vida.
Redondilla
2190
¿Está oscura?

JUANA
No.

CLAVELA
¡Oh, mal haya!
que te quería abrazar.

JUANA
Aquí me le puedes dar.

TRISTÁN
¿Besóla?

FELICIANO
Sí.

TRISTÁN
Bueno, vaya,
Redondilla
la paz de Francia le dio
2195
pensando que era mancebo.
Picó mi JuanaN
X
Nota del editor digital

«En el texto, “Julia”.»

en el cebo.
Lo extranjero la engañó.
Redondilla
¡Ah, bellaca, vive Dios,
que no se acuerda de mí!

FELICIANO
2200
¿Arminda no lo hará ansí?

TRISTÁN
Más la han besado de dos.

FELICIANO
Redondilla
¿De dos?

TRISTÁN
Pues ¿qué te pensabas,
que en saliendo de los muros
hacía por ti conjuros
2205
y echaba suertes con habas?
Redondilla
No hay mujer ausente un hombre,
aunque sea un serafín,
que de él se le de un cuatrín
ni se acuerde de su nombre.

FELICIANO
Redondilla
2210
¿A mí qué se me da de eso?
¿No amo a Clavela yo?

TRISTÁN
¿Y no es ella a quien besó?
Pues ¿qué me ha pegado el beso?

 (Sale CLAVELA, alterada.)

CLAVELA
Redondilla
Sin entendimiento salgo.

FELICIANO
2215
¿Cómo sin entendimiento?
¿Qué has visto?

CLAVELA
Mi perdimiento
y el mayor mal.

FELICIANO
Dinos algo.
Redondilla
¿Es muerto mi padre?

CLAVELA
No.

FELICIANO
¿Mi hermana?

CLAVELA
Tampoco.

FELICIANO
Pues
2220
¿qué puede ser? Di lo que es.

CLAVELA
No sé qué diga.

FELICIANO
Ni yo.

TRISTÁN
Redondilla
Sin duda que el diablo fue,
que ella viene endemoniada.

FELICIANO
Habla, pues, Clavela amada.

CLAVELA
2225
¡Ay, mi bien!, ¿cómo podré?

TRISTÁN
Redondilla
¿Si le ha dado mal de madre?

FELICIANO
Tristes sospechas me dan.

CLAVELA
Octavio y Teodoro están…

FELICIANO
¿Qué?

CLAVELA
Cenando con tu padre.

FELICIANO
Redondilla
2230
¿Octavio y Teodoro?

CLAVELA
Sí;
mi hermano y el que quería
ser mi esposo.

FELICIANO
Esposa mía,
¿qué me dices? Vuelve en ti.
Redondilla
Los ojos te han engañado.

CLAVELA
2235
Vestidos de peregrinos
los he visto.

FELICIANO
¡Desatinos!

CLAVELA
Yo los he visto y hablado,
Redondilla
y me hablaron en francés
y en francés les respondí.

FELICIANO
2240
¿Conociéronte?

CLAVELA
No y sí;
ellos lo dirán después.

FELICIANO
Redondilla
¿Hay más mal que desear,
que en mi casa, aunque sin daño,
venga yo al cabo de un año
2245
y no puedo en ella entrar?

CLAVELA
Redondilla
Mira que saldrán tras ti
y has de verlos y han de verte.
Sin duda es cierta mi muerte.

FELICIANO
Segura estarás aquí.

CLAVELA
Redondilla
2250
Pregunté a Julia quién eran,
y dijo que se casaba
con tu hermana el que me hablaba.

FELICIANO
Ojalá que ellos quisieran.—
Redondilla
Tristán, ¿me iré o entraré?

TRISTÁN
2255
Entra en tu casa, señor.

FELICIANO
Alto, yo pierdo el temor.
Ya en el umbral pongo el pie.
Redondilla
Tú disimula, y veamos
quién los ha traído aquí.

CLAVELA
2260
Y yo ¿entraré?

FELICIANO
Ven tras mí.

TRISTÁN
¿De qué tienes miedo? Vamos.

(Entranse, y salen dos ALGUACILES y un ESCRIBANO.)

ALGUACIL 1.º
Endecasílabos sueltos (tirada)
Hanme dado este aviso en un billete,
puesto que firma y nombre no tenía.

ESCRIBANO
¿Y que en casa de Alberto se recogen?

ALGUACIL 2.º
2265
Yo no creo que Alberto los conozca,
ni aun orden traigo de prender a Alberto.

ESCRIBANO
Y en efecto ¿creéis que son espías?

ALGUACIL 1.º
Y dicen que en el pecho del más noble
hallaréis joyas de oro y ricas prendas
2270
que valen más de treinta mil ducados.

ESCRIBANO
¿Pues peregrinos y tan gran tesoro?
Eso sólo nos basta por indicio.
O son ladrones o embozados príncipes.

ALGUACIL 1.º
Entrad y guardaremos esta puerta.

(Vase.)

ALGUACIL 2.º
2275
Voy, que sin duda es la prisión notable.

ESCRIBANO
Huélgome que a la mano nos viniese
tan buena causa. ¿Sospecháis, por dicha,
quién es el dueño de este aviso?

ALGUACIL 2.º
Bueno,
quien esto escribe disfrazó la letra.

ESCRIBANO
2280
Entrad, que me parece que hay ruido
y, en fin, importará vuestra persona.

 (Salen los PEREGRINOS, FELICIANO y ALBERTO.)

TEODORO
¿Que aquestas joyas no pueden ser mías
sabiendo Feliciano que yo puedo
tener en Francia mucha más riqueza?

FELICIANO
2285
Yo, señor, le conozco, y en su casa
he sido huésped, y es un hombre ilustre.

ALBERTO
Y yo le fío en treinta mil ducados.

ALGUACIL 1.º
Yo no puedo exceder de aquesta orden.
Mañana puede remediarse todo.

TEODORO
2290
Pues vamos, que no importa. Sólo quiero
que entendáis que por vos, señor, me pesa,
que tenía que hablar con vos mil cosas.

FELICIANO
Mi padre irá mañana, iremos juntos
adonde vuestra libertad se trate.

ALBERTO
2295
¡Que ansí la bienvenida de mi hijo
aguase una desdicha como aquésta!

TEODORO
No la tengáis, Alberto, por desdicha.—
Vamos, señor.

ALGUACIL 1.º
Caminen, pues, alerta,
y no se me descuide hasta la puerta.

(Llévanlos.)

ALBERTO
Redondilla
2300
¿Hay desdicha semejante?
¿Que, al fin, caballeros son?

FELICIANO
Son muy nobles en León,
y de lo más importante.

ALBERTO
Redondilla
¿Los mil escudos refieres
2305
que se los debes?

FELICIANO
También.

ALBERTO
Quiere a Leonida los den.

FELICIANO
¿Para qué?

ALBERTO
Para alfileres,
Redondilla
y aun me ha pedido a Leonida.

FELICIANO
Muy bien se la puedes dar.
2310
(Este se quiere vengar
de la ofensa recebida.)

ALBERTO
Redondilla
¿Quién habrá hecho este enredo?

FELICIANO
Nunca falta en Madrid quién.

ALBERTO
Dime si casarla es bien
2315
y darle a tu hermana puedo.

FELICIANO
Redondilla
Hay mucho en eso que hablar.

ALBERTO
Dilo.

FELICIANO
Sabráslo después.

(Entra CLAVELA.)

CLAVELA
¡Ah, nuestro amo!

ALBERTO
¿Qué hay, francés?

CLAVELA
No me agrada este lugar.
Redondilla
2320
Si a éstos prenden por espías,
¿mañana qué harán de mí?

ALBERTO
Buen lacayo traes aquí.
Bien habla.

FELICIANO
Supo en dos días.

ALBERTO
Redondilla
A ser mujer, era hermosa.

CLAVELA
2325
(¿Cosa que al viejo alborote?)

ALBERTO
¿Cómo te llamas?

CLAVELA
Perote.

ALBERTO
¿De dónde eres?

CLAVELA
De Tolosa.

ALBERTO
Redondilla
Y ¿qué sabes?

CLAVELA
Caminar.

ALBERTO
¿Cómo?

CLAVELA
A caballo y a pie.

ALBERTO
2330
¡Gran bellaco!

CLAVELA
Soilo a fe.

ALBERTO
Haceros quiero azotar.

CLAVELA
Redondilla
¿De qué ha de ser el azote?

ALBERTO
De un vestido que os daré.

FELICIANO
Bésale los pies.

CLAVELA
Sí haré.

(A sus pies.)

ALBERTO
2335
Alzaos del suelo, Perote.

CLAVELA
Redondilla
Bien estoy ansí.

FELICIANO
Leonida
sale a verme.

ALBERTO
Yo me voy.—
(Sale LEONIDA.)
Pedro, vuestro amigo soy.

CLAVELA
Yo esclavo toda mi vida.

ALBERTO
Redondilla
2340
Un padre tenéis en mí
como el mismo Feliciano.

CLAVELA
Eso, señor, es muy llano,
y que yo lo creo ansí.

ALBERTO
Redondilla
Denle de cenar muy bien.—
2345
Y tú, Leonida, hazle dar
buena cama en buen lugar.

(Vase.)

LEONIDA
Y aun en mi alma también.
Redondilla
(Que no sé qué gracia encierra,
pues en tan breve distancia
2350
no me dio la paz de Francia,
sino de España la guerra.
Redondilla
¿Qué he de hacer, triste de mí,
pues un muchacho rapaz
me ha sacado de mi paz
2355
después que mi paz le di?)
Redondilla
Pues, hermano, ¿cómo ha ido?
Buen enojo ha sido.

FELICIANO
Extraño.

LEONIDA
No escribirnos en un año
extraño rigor ha sido.

FELICIANO
Redondilla
2360
En la guerra está excusada
la voluntad, porque, en suma,
poco ejercita la pluma
quien sólo atiende a la espada.

LEONIDA
Redondilla
Esa no es buena disculpa.

CLAVELA
2365
Tuvimos mucho que hacer,
y en la guerra no hay poner
a quien se disculpa culpa.

LEONIDA
Redondilla
¿Y eres tú también soldado?

CLAVELA
Porque una vez me quebré
2370
con mi dueño me quedé;
pero nunca me ha soldado.

LEONIDA
Redondilla
Para telas y damascos
más que para pelear
eres tú.

CLAVELA
Bien sé llevar
2375
el arcabuz y los frascos.
Redondilla
Mucho he querido a mi amo.
No ha habido guerra cruel
en que yo me aparte de él.

FELICIANO
Y yo por eso te amo,
Redondilla
2380
que eres un leal francés.

LEONIDA
Mucho te quiere mi hermano.

CLAVELA
Tanto, que invierno y verano
me acuesto siempre a sus pies.
Redondilla
Pero en faltando jueces
2385
tan bellaco vengo a ser,
que me suele amanecer,
ya me entiendes, muchas veces.

LEONIDA
Redondilla
Cuanta merced le habrás hecho
la tiene bien merecida.

FELICIANO
2390
Yo te prometo, Leonida,
que es el alma de mi pecho.

CLAVELA
Redondilla
Apuréme en tu crisol
y este valor tuyo es,
que en este cuerpo francés
2395
hay espíritu español.

LEONIDA
Redondilla
¡Qué gracioso francesillo!

FELICIANO
Un abrazo quiero darte
por darme en ti tanta parte.

CLAVELA
Testigos hay si es sencillo,
Redondilla
2400
y aun temo que le hay en mí,
más que espíritu, testigo
de que soy tu fiel amigo.

FELICIANO
¿Sábeslo de cierto?

CLAVELA
Sí.

FELICIANO
Redondilla
A mi padre voy a ver.
2405
Tú, Leonida, haz de manera
que conmigo duerma.

LEONIDA
Espera,
que diferencia ha de haber.
Redondilla
¿Para qué es tanta estrechura
habiendo camas en qué?

CLAVELA
2410
Que bien con él dormiré.
Una para dos procura.

FELICIANO
Redondilla
Pedro, venme a descalzar.

CLAVELA
Señor amo, luego voy.
(Alegre esta noche estoy.
2415
¡Por Dios, que os he de brindar!)
Redondilla
Ven acá, ¿tienes deseo
de casarte?

LEONIDA
Sí, contigo.

CLAVELA
¿Conmigo? Dios me es testigo
que soy capón.

LEONIDA
No lo creo.

CLAVELA
Redondilla
2420
Algún día lo veréis.

LEONIDA
Y ¿cuándo será ese día?

CLAVELA
El que os hallaréis más fría
que imaginaros podréis.

LEONIDA
Redondilla
No te finjas tan helado.

CLAVELA
2425
Y os quiero desengañar
que soy sirena del mar,
de medio abajo pescado.

LEONIDA
Redondilla
¿Búrlaste, por vida mía?
No hagas donaire de mí.

(Sale JULIAN
X
Nota del editor digital

«Es la misma que antes llamó “Juana” y vuelve luego a nombrar así.»

.)

JULIA
2430
Mi señor te llama.

LEONIDA
¿A mí?

JULIA
A ti, señora, decía
Redondilla
mi señor y Feliciano.

LEONIDA
Voy por que no se alborote.

 (Vase.)

CLAVELA
Aquí está vuestro Perote.

LEONIDA
2435
¡Ay, mi Pedro!

JULIA
¿Qué hay, hermano?
Redondilla
¿Anda bueno con mi ama?
¿Ya se le olvida del beso?

CLAVELA
Téngole en el alma impreso.
Tú serás, Julia, mi dama.

JULIA
Redondilla
2440
Juntos hemos de dormir.

CLAVELA
Duermo yo con mi señor.

JULIA
Conmigo será mejor.

CLAVELA
¡Oh, quién pudiera decir
Redondilla
que le quiero cuanto puedo!
2445
Mira que me has de enseñar
luego a tañer y cantar
en español.

JULIA
Habla quedo.